Juanjo Expósito volverá este domingo, con el Llagostera, al que fue su estadio desde enero de 2014 hasta que se vio obligado a aceptar la rescisión de su contrato en agosto de ese mismo año, por no contar para Alfonso Serrano y Álvaro Cervera. El delantero sigue sin entender por qué lo descartaron.

Sin el ánimo de "darle más vueltas" a algo que "ya forma parte del pasado", Juanjo reconoció, en Radio El Día, que nunca le quedó clara la razón que condujo a la comisión deportiva del Tenerife a aconsejarle su salida a otro equipo. "Me dieron la noticia cuando mejor me estaba encontrando y fue un golpe duro, pero las cosas son así. Se me cerró una puerta y se me abrió otra. No me equivoqué al fichar por el Llagostera", admitió.

De esa forma tan inesperada para el jugador acabó la relación laboral del Tenerife con Juanjo, a quien le dieron la única explicación de que su baja tenía que ver con "la confección de la plantilla". Aún así, ni en ese momento ni ahora, a Juanjo le pareció una razón de peso. "En su día le dije a Álvaro que se habían equivocado al no contar conmigo. Y espero que algún día me lo reconozcan. Sigo pensando que pude serle útil a este Tenerife".

De momento, el autor de cuatro goles esta temporada para el Llagostera, prefiere dejar a un lado su particular desvinculación del Tenerife y advierte de que no se dejará llevar por los vínculos sentimentales si el domingo tiene la oportunidad de colar el balón en la portería local. Es más, ya se ha imaginado cómo lo festejaría. "Se lo dedicaría a mi suegro, que falleció de repente y nos está ayudando desde el cielo. Pero no habrá rencor hacia nadie de Tenerife ni del club, porque mi etapa en la Isla me marcó mucho", confesó.

El destino lo condujo el pasado verano a un club novato en la categoría, el Llagostera, que se ha convertido en la revelación de la Liga. "Es un equipo que e ha ascendido siete veces en diez años y que está acostumbrado a ganar, y esa inercia es fundamental", señaló el atacante al exponer algunas de las claves del éxito de la escuadra gerundense. "Además, los jugadores son casi los mismos que subieron el año pasado. Aunque nos costó adaptarnos a la categoría, ahora llevamos siete victorias y tres empates en los últimos diez partidos y eso nos ha lanzado a la posibilidad de entrar en la promoción".

En el caso de no llegar tan lejos, avisó que su equipo "dará algún susto en las jornadas que restan", y aseguró que la "fuerza del Llagostera reside en el vestuario y en las ganas de hacer las cosas bien".