Adrián San Miguel, portero sevillano del West Ham que se acaba de convertir en el primer guardameta que detiene tres penaltis seguidos en la historia de la ''Premier League'' inglesa, ha afirmado que está "muy orgulloso por haber batido ese récord".

Adrián, de 28 años y que vive su segunda temporada en el club londinense, paró una pena máxima lanzada por Charlie Austin el sábado frente al Queens Park Rangers, después de haber detenido la que le tiró David Nugent (Leicester) el 7 de abril y, anteriormente, la ejecutada por Harry Kane (Tottenham) el 22 de febrero.

El meta andaluz, que se encuentra en Sevilla disfrutando de unos días de descanso, ha aseguradoque estas paradas responden "al trabajo de estudio de los lanzadores" que realiza "junto al cuerpo técnico" y que le permitió saber "que Kane y Austin suelen tirar a su derecha", mientras que "Nugent lo hace a su izquierda".

Formado en la cantera bética, con cuyo primer equipo disputó una treintena de partidos en la temporada 2012-13, Adrián ha reconocido estar "muy contento en el West Ham aunque al principio fue duro adaptarse", pero ha resaltado que se siente "a gusto porque es un equipo sufridor, igual que el Betis", su club de toda la vida.

Aunque le "dolió la manera de salir del Betis" en el verano de 2013, el arquero sevillano continúa "siendo bético", por lo que le "alegra que esté prácticamente ascendido, en especial por la afición y también por todo el cuerpo técnico, que" lo "apoyó muchísimo".

Para Adrián, que reprocha a "los que mandaban" entonces que "decidieran apostar por gente de fuera", el descenso del año pasado "fue muy fuerte, no tiene nombre", pues el Betis obtuvo 25 puntos y completó la peor temporada de su historia.

El guardameta del West Ham también ha admitido que "en un futuro cercano no" se plantea "volver al Betis", si bien le "gustaría hacerlo a más largo plazo" porque "los dieciséis años pasados en el club", en el que ingresó como alevín, "no son pocos".