El estadounidense Patrick Reed, líder del Abierto de golf de Estados Unidos que se disputa esta semana en el recorrido de Chambers Bay, cerca de Seattle, ha seguido dos grupos detrás la estela del líder de la primera jornada, su compatriota Dustin Johnson, hasta los últimos tres hoyos, en los que Johnson se ha dejado dos golpes y ha terminado con cuatro bajo par, a un golpe de Reed y Jordan Spieth.

El joven texano de 21 años, Spieth, ganador del Masters de Augusta de este año, ha disfrutado de las condiciones más benignas de la mañana y ha logrado recuperar terreno con el putter, su herramienta preferida.

El sudafricano Branden Grace y el holandés Joost Luiten, recientemente incorporados a los cincuenta mejores del mundo, se han colado entre un grupo de ocho líderes dominado por seis estadounidenses, entre ellos J.B. Holmes, que se ha anotado una de las dos mejores rondas de la jornada (-4).

La otra ha sido obra del sudafricano Louis Oosthuizen, que ha logrado pasar el corte y superar la debacle del día anterior junto con sus compañeros de partido, los estadounidenses Tiger Woods y Rickie Fowler.

Woods fue el dramático protagonista de la primera jornada, con un resultado de diez sobre el par que ha empeorado hoy (), y se ha quedado fuera del corte por segunda vez en los 17 Abiertos de EE.UU. que ha disputado.

Fowler, que venía de ganar The Players, se ha contagiado de los males de Woods y ha quedado fuera de la competición del fin de semana, con nada menos que 14 golpes sobre el par.

Además de Woods y Fowler, ha caído estrepitosamente Darren Clarke, capitán del equipo europeo de la Ryder, y Gary Woodland, número 29 del ránking mundial, aquejado de un virus desde el comienzo del torneo.

Las enfermedades y las lesiones también sido protagonistas de las primeras dos jornadas. El australiano Jason Day se ha desvanecido por un ataque de vértigo en el último hoyo, pero ha logrado acabar con menos 2 y parece estar en condiciones de jugar el fin de semana.

Además, las lomas escarpadas y pobladas de maleza que flanquean las calles del recorrido de Chambers Bay han visto tambalearse a varios caddies. El caddie del escocés Stephen Gallagher, que ha quedado fuera con diez sobre el par, se lesionó el tobillo y tuvo que dejar la bolsa, y el caddie de Henrik Stenson, que ha perdido el coliderato de la primera jornada, ha tenido que asistir a su jugador con el brazo escayolado.

Sin embargo, los obstáculos más infranqueables de Chambers Bay han sido las calles y los greenes que el viento y la falta de lluvia han endurecido como rocas al final de la jornada.

El clima le ha facilitado la labor a la Asociación de Golf de Estados Unidos, que solo ha tenido que complicar la situación de algunas banderas para lograr que nadie pasara de menos cinco y reducir el número de jugadores por debajo del par.

No hay pronósticos de lluvia para el fin de semana, pero sí presagios de más debacles ante las condiciones progresivamente infranqueables del recorrido de la 115 edición del Abierto de golf de Estados Unidos.