El Tenerife que subió a Primera en 2001, protagonizando un apasionante mano a mano con el Atlético de Madrid en la recta final de la Liga y que dio el paso definitivo en Leganés con el gol de Hugo Morales, fue el Tenerife de Rafa Benítez, pero también de Francisco Ayestarán (Guipúzcoa, 5-2-1963).
El que fuera hombre de confianza del actual técnico del Real Madrid en aquella campaña, y en algunas más (Valencia y Liverpool), acaba de finalizar una "temporada perfecta" como primer entrenador del Maccabi de Tel Aviv, con el que se alzó con un triplete histórico. Pako, que ya había dejado de ser asistente para dirigir en solitario al Estudiantes Tecos mexicano en 2013, tiene entre manos un nuevo proyecto (¿vuelve al Liverpool?) y confía en consolidar su carrera como técnico en Europa; y "por qué no" en España. De momento, ayer visitó el Tenerife International Camps.
Ayestarán contó que no ha perdido el contacto con Tenerife desde su exitoso paso por la Isla en la campaña 00/01. "Es gran satisfacción estar aquí. Siempre estuve conectado a este lugar. He venido varias veces. De hecho, mi mujer es de Lanzarote. La sensación es muy agradable, porque es donde viví uno de mis mejores años a nivel deportivo y por experiencia vital".
Tanto para él como para muchos de los jugadores de aquella plantilla, el tercer ascenso a Primera del Tenerife fue crucial en sus carreras. En el caso de Ayestarán y Rafa Benítez, despertaron el interés del Valencia, club en el que se proclamaron campeones de Liga dos veces. "El Tenerife fue una catapulta impresionante para todos".
En cierto modo, hace quince años se creó un vínculo especial en el vestuario del club blanquiazul que se ha mantenido con el paso de los años. No en vano, Pako sigue en contacto con muchos de los que fueron sus pupilos. "Suelo hablar con Luis García, Ayoze, Martí, Curro Torres, Mista... Todos esos chicos empezaron en aquel momento y creo que nos tenemos que dar las gracias mutuamente, porque crecimos juntos. Todavía existe esa sensación de agradecimiento", destacó el técnico, que tampoco ha olvidado al entorno del club, al tinerfeñismo. "En cualquier sitio hay pasión, pero el calor que sentimos aquel año fue impresionante. Esta es una afición que merece que el equipo vuelva a ser lo que fue".
Aunque sus planes a corto plazo lo llevarán por otro rumbo, no descarta liderar algún día a un equipo español; y entre las opciones que se le podrían plantear le encantaría volver a sentarse de nuevo en el banquillo local del Heliodoro Rodríguez López. "¿Por qué no?", preguntó cuando se le planteó esta posibilidad. "Soy un entrenador que se fija en los proyectos y pienso que los resultados hay que basarlos en los procesos. Si encuentro un club que me lo ofrezca, ahí estaré", avisó.
Ayestarán explicó que el cambio de ser segundo a primer entrenador formó parte de una "transición muy natural". Llegó a darse cuenta que tenía "cosas que expresar" como profesional del fútbol y no tuvo dudas a la hora de dar el paso de independizarse. "Tienes una forma diferente de ver las cosas, las quieres poner en práctica y decides que necesitas marcar tu propio camino", confesó.
Ese salto en su trayectoria lo llevó a triunfar en el Macabi, pero ya sabe que no repetirá en el club de Tel Aviv. "En ese equipo ya conseguí lo máximo que se puede ganar y ahora prefiero buscar un proyecto nuevo, algo más ambicioso y también más cercano a Europa", concluyó el exblanquiazul.
"El regreso de Rafa al Madrid era una cuestión de tiempo"
Los caminos de Rafa Benítez y Pako Ayestarán se separaron en 2008, en medio de la etapa que compartieron en el Liverpool. A partir de ahí, el guipuzcoano siguió siendo segundo entrenador, primero con Quique Sánchez Flores (Benfica y Al-Ahli) como jefe y luego ayudando a Unai Emery (Valencia). A continuación, dirigió en solitario al Estudiantes Tecos y al Maccabi. Por su parte, Benítez continuó dos campañas más en el Liverpool y se puso luego al frente del Inter, Chelsea y Nápoles, antes de comprometerse este verano con el Real Madrid. Ayestarán se refirió ayer a esta nueva aventura profesional del que fue su compañero de equipo técnico. "Habrá que verlo. Todos sabemos que Rafa es un gran entrenador y el Real Madrid habrá valorado lo que le puede dar. Ojalá le salga bien", manifestó. "Era una cuestión de tiempo que regresara al club, porque él salió de allí. En la temporada 2006/07, estando los dos en el Liverpool, tuvo una oferta del Real Madrid, pero en aquel momento no la consideró adecuada", añadió Pako.
Una "temporada perfecta" en el Maccabi de Tel Aviv
"Ganamos los tres títulos por los que competimos", dijo Ayestarán refiriéndose a la Liga, la Toto Cup y la Copa del Estado de Israel. "No se puede pedir más. Fue una gran satisfacción. Con esta experiencia en el Maccabi pude comprobar que las cosas que me planteaba podían dar sus frutos".