El tenista español Rafael Nadal, octavo cabeza de serie de la ATP, dijo hoy, tras superar con holgura al suizo Stan Wawrinka en cuartos de final del Másters 1000 de Shanghái, que se ve "por el buen camino" hacia la recuperación de su nivel de cara al año que viene, tras dos buenas semanas en China.

En efecto, después de llegar a la final en el Abierto de Pekín la semana pasada, Nadal firmó hoy una contundente victoria ante Wawrinka, actual cuarta raqueta mundial, por 6-2 y 6-1, y aunque está contento con ese rendimiento, dijo prudentemente que espera mañana un choque "muy complicado" con el francés Jo-Wilfried Tsonga.

"Hoy he jugado un primer set muy bueno, con un nivel de juego creo que bastante alto, la verdad", valoró tras su partido de hoy contra Wawrinka, "y después en el segundo set él ha bajado, yo creo que se ha ido del partido, pero en general creo que el nivel está siendo muy positivo, estoy contento por cómo está funcionando todo".

El tenista balear dijo estar así satisfecho "desde la humildad y tranquilidad de saber que es fruto del trabajo diario, pero que no está todo hecho, sino que tengo que seguir mejorando y seguir trabajando para intentar mantener esa línea una temporada más, y después intentar dar un pasito más hacia adelante".

"Esa es la forma de intentar recuperar el nivel que me gustaría volver a tener de cara al año que viene", añadió.

Las de Pekín y Shanghái hasta hoy "son dos semanas que de momento están siendo muy positivas, (y creo) que pase lo que pase mañana o lo que queda de torneo, pues me hacen volverme a España después y continuar con una energía buena, de saber que el trabajo que estoy haciendo es el adecuado y es el positivo", declaró.

"Evidentemente, cuando uno trabaja y se esfuerza al máximo, que salgan los resultados es lo que te sigue dando la energía para seguir creyendo que lo que estás haciendo es lo adecuado, que vas por el buen camino", señaló, y dijo estar trabajando para "intentar mantener ese nivel de competitividad hasta el final de año".

En efecto, nada más superar hoy a Wawrinka, llegó a declarar a pie de pista que se ve confiado en sumar los puntos necesarios para entrar en la Copa Másters de Londres.

En cualquier caso, tratará de "aprovechar el empujón mental que me puede dar eso (terminar 2015 en un mejor nivel) para dar un pasito más hacia adelante e intentar empezar el año que viene fuerte".

En ese sentido, recordó que últimamente ha podido avanzar mucho en el control de sus emociones en la pista, ya que "sin eso es imposible nada de lo demás, ese es el principio básico de todo".

Ahora "estoy jugando creo que con menos tiempo, estoy perdiendo mucha menos pista de lo que perdido muchas veces durante el año, estoy jugando más adelante, el ''drive'' me está funcionando bien, estoy encadenando menos errores consecutivos, cosa que este año sí que me ha pasado más veces de la cuenta...", explicó.

"Y después estoy consiguiendo atacar, intentar ir hacia la red cuando puedo, y sobre todo no estar en posiciones muy desfavorables, o no dejarle al rival que me domine con facilidad como ha pasado muchas veces este año", continuó.

Esta temporada "lo que ha pasado es que no he tenido en todo momento el control de mis emociones en la pista durante mucho tiempo de todo este año... no todo, pero durante muchas fases del año", reiteró.

"Cuando eso ocurre, todo lo demás se antoja prácticamente imposible, porque si uno no tiene la tranquilidad de golpear la pelota con calma, si los nervios no dejan hacer lo que uno cree que tiene que hacer, no es posible ni desarrollar el juego que uno quiere, ni entrenar como uno quiere, ni poner en práctica lo que uno quiere", indicó.

De cara a mañana, en semifinales antes Tsonga, número 16 mundial de la ATP, que hoy se impuso con muchas más dificultades al sudafricano Kevin Anderson por 7-6 (6), 5-7 y 6-4, Nadal no negó que espera "un partido muy complicado".

"Él está jugando muy bien, está en semifinales, viene de ganar partidos difíciles y de buen nivel, o sea que vendrá con confianza, y es un jugador que cuando juega con la adrenalina alta es muy complicado de parar", advirtió.

El francés "tiene un gran servicio, es un jugador eléctrico, de servicio y derechas muy buenas, y que se va muy bien hacia la red y la cubre muy bien, y (ante él) es difícil encontrar huecos", le elogió.

De ahí que mañana "hay que estar muy preparado para jugar muy concentrado con mi servicio e intentar no hacerle pista, intentar que él no golpee la pelota en posiciones muy favorables, y a partir de ahí, jugar agresivo sin darle mucho terreno", adelantó.

Ante el español, que dijo a los medios que estuvo entrenando cerca de 80 minutos antes del partido, Wawrinka, que dijo sufrir de fatiga acumulada tras ganar el Abierto de Japón hace unos días, reconoció que el español es un rival casi imposible en esas condiciones.

"Por supuesto que noto el efecto de anoche y de los últimos 10 días", reconoció, "he estado jugando un montón, y estuve sufriendo un poquito, es así de simple. Contra Nadal no puedes hacer nada si no estás al cien por cien".