Una vez más, el carácter de líder y de jugador completo surgió en el juego del pívot español Marc Gasol y los Grizzlies de Memphis se aprovecharon a la hora de conseguir la victoria a domicilio por 103-112 ante los Pacers de Indiana.

El triunfo no sólo era importante por haberlo logrado fuera de su campo y ante un rival que aspira a luchar por el título de la Conferencia Este sino que llegaba 24 horas después de haber sido humillados ante sus seguidores por los Cavaliers de Cleveland (76-106) y haber dado una imagen muy pobre ante sus seguidores.

"Sabíamos que lo que sucedió ante los Cavaliers no era algo normal, ni tampoco teníamos una explicación clara a lo que sucedió, pero si estábamos convencidos que ante los Pacers podíamos ganar, especialmente cuando llegamos al cuarto periodo", valoró Gasol.

El jugador de Sant Boi que lideró el ataque de los Grizzlies al conseguir 20 puntos en los 33 minutos que disputó y encabezó una lista de siete jugadores que tuvieron números de dos dígitos, incluidos cuatro titulares.

Gasol anotó 7 de 13 tiros de campo y 6 de 7 desde la línea de personal, mientras que en las acciones bajo los aros capturó ocho rebotes, incluidos siete que fueron defensivos.

El mediano de los hermano Gasol también repartió tres asistencias y puso un tapón. La figura de Gasol fue aun más decisiva en los últimos cinco minutos del cuarto periodo cuando anotó ocho puntos que permitió a los Grizzlies cerrar el partido con racha de 17-8.

"Los últimos cinco minutos jugamos realmente bien", destacó Gasol al concluir el partido que se disputó en el Bankers Life Fieldhouse, de Indianapolis. "Defensivamente fuimos mucho más agresivos".

El internacional español reiteró que cuando la defensa hace su trabajo en ataque incrementa de inmediato su nivel de eficacia.

"No es ningún secreto que cuando nuestra defensa se impone, luego en el ataque las cosas salen mucho mejor y somos un equipo que podemos anotar con facilidad", agregó el mediano de los hermanos Gasol.

Mientras Gasol recuperó el camino del triunfo, José Manuel Calderón, que siguió de base titular de los Knicks de Nueva York, vio cómo el equipo perdía en su campo del Madison Square Garden por 101-112 ante los Hawks de Atlanta, del pívot dominicano Al Horford y el ala-pívot brasileño Tiago Splitter.

Calderón, que ha estado limitado a 18 minutos en los dos partidos que lleva disputado su equipo, siguió sin ser factor importante en el juego de los Knicks al aportar dos puntos.

El jugador de Villanueva de la Serena falló los cinco tiros de campo que hizo, incluidos dos triples, anotó 2-2 desde la línea de personal, capturó un rebote, dio una asistencia y recuperó un balón.