El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, rompe este sábado su costumbre de no acudir a partidos de fútbol para asistir al encuentro entre el Real Madrid y el Fútbol Club Barcelona, según han informado fuentes gubernamentales.

Las mismas fuentes han explicado que se trata de un gesto político del presidente para transmitir "normalidad" pese a la amenaza terrorista (que se encuentra en el nivel 4 de 5 desde los atentados en París la semana pasada).

Los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado han desplegado un fuerte contingente policial dentro y fuera del Estadio Santiago Bernabéu, con varios controles en los accesos y 1.200 agentes, sin contar con la Policía Municipal, los cuerpos de Emergencias y de Cruz Roja y los más de 1.000 agentes de seguridad privada contratados por el Real Madrid.