El alero asturiano del Iberostar Tenerife Saúl Blanco afronta esta semana con el deseo de volver a disputar un partido de baloncesto, después de recuperarse de una rotura de cúbito y radio que sufrió a mediados del mes de mayo, en la penúltima jornada de la Liga Endesa 2014/2015.

Tras la operación, la rehabilitación, la puesta a punto y el periodo de adaptación a la exigencia física de un equipo de elite, el jugador espera dar el último paso en su periodo de recuperación y "estrenar la camiseta de esta temporada".

"Si es esta semana, perfecto. Y si no, habrá que esperar", ha comentado Blanco, quien ha reconocido que los últimos seis meses han sido "largos y duros", con mucho trabajo de gimnasio, aunque ha negado que durante este periodo haya tenido ansiedad, sino más bien ganas de volver lo antes posible.

El alero asturiano ha relatado que ahora en los entrenamientos tiene algunas molestias, ya que después de tantos meses cuesta poner "la maquinaria en funcionamiento".

Tras tres temporadas a las órdenes de Alejandro Martínez, Saúl Blanco trabaja ahora a las órdenes del bilbaíno Txus Vidorreta, quien ha llegado a la isla introduciendo "muchos cambios" a la hora de plantear los partidos, ya que tiene una "forma mucho más estructurada".

"Son dos entrenadores diferentes, cada uno tiene su método", ha analizado el jugador.

Saúl Blanco ha advertido de que el encuentro del próximo domingo ante el Manresa es un rival de "la liga" del Iberostar Tenerife, por lo que deben tratar de ganar "por lo civil o por lo criminal".

El jugador ha comentado que la principal diferencia en el equipo con respecto a otras temporadas es que ha habido muchos cambios, ya que otros años llegaban al plantel dos o tres jugadores y este verano se ha renovado a la mitad de la plantilla.

"Ha sido una de las claves de que nos haya costado acoplarnos para poner en funcionamiento todo el equipo", ha agregado.