José Luis Martí asume con naturalidad la derrota con el Alcorcón y ha aprovechado la cuenta atrás hacia la visita a El Toralín para corregir los errores que detectó el lu-nes. Además, ha intentado preparar a su equipo para que se adapte a las circunstancias del encuentro con la Ponferradina, un partido que podría estar condicionado por la lluvia y el estado del campo. Sobre las modificaciones en la alineación, no avanza ningún indicio. Pero advierte de que nadie tiene una plaza segura en el "once". Ni siquiera los habituales titulares.

¿Qué tal la semana?

Con ganas de que llegue la próxima jornada. Lo que quieres después de una derrota es volver a competir. Hemos trabajado estos días en lo que debíamos corregir tras el encuentro con el Alcorcón, sabiendo que el de Ponferrada será totalmente diferente.

¿Quedó muy tocado el grupo?

Casi todos llevan muchos años en esta profesión y saben que los resultados vienen como vienen y hay que aceptarlos. Ya no podemos volver atrás. Perdimos con el Alcorcón y hay que saber por qué no encontramos los espacios y las ocasiones que quisimos tener. Había que intentar corregir cosas y trabajar con vistas al siguiente, que es el que podemos ganar. Es lo que he intentado transmitir para que los chicos vean que verdaderamente hay que estar preparados para jugar este domingo, tanto anímica como tácticamente.

¿Repetirá el 4-2-3-1 o recuperará el trío de centrocampistas?

Barajamos las dos posibilidades. El equipo tiene asimilados los conceptos de los dos esquemas, pero todo depende más de la evolución del propio sistema que el sistema en general. Las diferencias están en los pequeños matices.

¿Se plantea dejar en el banquillo a algún titular habitual que, a lo mejor, no esté rindiendo bien?

El jugador que no esté rindiendo o no esté colaborando en cuanto a lo que es su verdadero nivel, o se irá al banquillo o se quedará sin convocar si hay otro que lo esté haciendo mejor. No por tener más experiencia hay que tratarlos de diferente manera. Está claro que hay jugadores muy importantes, que tienen cierto grado y peso, pero lo que requiere el fútbol es competitividad. Y el que mejor afronte ese nivel será quien saltará al terreno de juego.

¿Está dudando entre Cristo y Tomás para completar el "once"?

Tengo una idea muy clara de lo que pretendo y de lo que vamos a vivir. Es verdad que todo va un poco en función de las informaciones que tenemos y de las dificultades que nos vamos a encontrar por la lluvia y por las condiciones del campo. Después del último entrenamiento decidiremos quiénes viajan y juegan.

Alberto vuelve tras una sanción. ¿Es titular o no lo tiene tan claro?

Intento analizar el último entrenamiento. Alberto es un jugador importante para nosotros, sobre todo por su carisma y por la intensidad que le pone al partido en todas las acciones en las que interviene. Nos va a aportar muchas cosas. Para nosotros es importante, pero vamos a barajar que tenemos otros hombres en el centro del campo que también lo han hecho bien y decidiremos sobre la marcha. Pero él es importante.

¿Saúl está listo para debutar?

Se ha integrado muy bien. Ya conoce a los compañeros y lo que es el equipo. Es uno más de los que están preparados para viajar si decidimos que esté en la lista.

Esta semana ha puesto a Abel en la defensa. ¿Tendrá que adaptarse a ese puesto para jugar?

Abel es un chico que está entrenando extraordinariamente, pero no está teniendo oportunidades para entrar porque los otros jugadores también lo están haciendo bien. Tendrá que esperar su momento, ya sea en una posición o en otra. Simplemente le transmito la confianza que puedo, independientemente de las dificultades que conlleva el hecho de verte fuera de una convocatoria.

¿Le ha aconsejado a Abel cambiar de equipo este mes?

Pensamos en la Ponferradina. No estamos valorando esas posibilidades. Pero él es un chico que está muy a gusto aquí y que está trabajando muy bien. Tiene que esperar su oportunidad, aunque sabemos que hay jugadores por delante y que no lo tendrá fácil.

¿Le preocupa que el Tenerife suela encajar goles primero?

Nos gustaría ir por delante en el marcador. Tenemos que reducir los goles en contra. Es una de las facetas que debemos corregir. El equipo tiene gol, lo ha demostrado durante la temporada. Pero es verdad que hay que reducir lo antes posible el bagaje en contra.

¿Cómo influirán la lluvia y el estado del terreno de juego?

Le he transmitido al grupo lo que puede pasar. Luego, el partido será diferente o no. Pero si ha estado toda la semana lloviendo y el campo está difícil, evidentemente habrá mucho balón dividido y mucho contacto. Debemos estar preparados desde ya y asimilar lo antes posible todo lo que se pueda producir. A partir de ahí, podremos encontrarnos otro partido y habrá que adaptarse.

¿Pero la idea se mantendrá?

La idea será la de jugar, tener la posesión del balón la mayor cantidad posible de tiempo, estar en el campo rival... Pero nos adaptamos también al adversario, a las condiciones del campo. A veces el contrario no te lo permite, pero tendremos que ser capaces de llevar el peso del partido, más allá de que, a veces, en el fútbol no encuentras esa solución y te toca estar en el otro lado, defendiéndote. Cuando nos toque sufrir, lo haremos juntos para aprovechar los contragolpes, si el partido transcurre así. La idea inicial no es esa, pero también hay que trabajar lo otro por si sucede. Lo principal es que los chicos sepan lo que tienen que hacer en cada momento.

¿Cómo es la Ponferradina?

Es un equipo que juega con una intensidad altísima en su campo. Busca el gol con muchos hombres arriba, tiene jugadores peligrosos en ataque y alterna el fútbol de combinación con el directo, porque tiene gente para hacerlo, pero es cierto que estamos preparados para afrontar y contrarrestar eso. Intentaremos ser protagonistas en función de cómo veamos las posibilidades del partido.