Quedan unos días para el cierre del mercado de invierno y una decena de conjuntos de la Segunda División A ha reforzado ya su centro del campo. Junto a la búsqueda del ansiado goleador o el central que cierre la vía de agua en el capítulo de tantos encajados, es el puesto más demandado. De ahí que todavía algunos directores deportivos sigan a la caza y captura de un especialista, ya sea en tareas de contención o de creación del juego.

Tenerife y Almería, algo rezagados por distintas razones, podrían ser los últimos en acometer la contratación de un mediocentro. Ambos equipos lo buscan de características ofensivas. Y los dos tienen como una de sus alternativas a Javi Lara. Los andaluces se mantienen a la espera de una opción mejor, mientras que Alfonso Serrano firmaría al cordobés hoy mismo si este aceptara. En cualquier caso, el jugador aguarda una oferta de Primera y apura plazos antes de decidir.

A la espera del exjugador del Atlético Kolkata indio, blanquiazules y almerienses esperan descartes de Primera y observan, con algo de recelo por el coste en el caso de los insulares, el mercado extranjero. No será fácil, pero con 72 horas por delante confían en mejorar su medular con ese último movimiento. Tanto al menos como ya han hecho otros diez rivales.

Sin salir de Segunda han conseguido reforzarse Leganés, Osasuna y Zaragoza. Los primeros se han hecho con David Timor, que abandonó el Valladolid. En el caso de los navarros, lograron incorporar a Manuel Sánchez, procedente del Huesca. Por último, el club maño aprovechó la salida de Javi Ros del hiperactivo en este mes de enero Mallorca. De Primera llegó al Nástic de Tarragona Levy Madinda, cedido por el Celta. La entidad catalana también sumó a su proyecto a Aburjania, abriendo la vía del extranjero. La imitaron el Elche, que alcanzó un acuerdo con Boca Juniors para el préstamo de Cristaldo; y el Alavés, que logró contratar a Bernardello, que había rescindido recientemente con el Cruz Azul mexicano.

Pero la opción que más ha triunfado en este mercado de invierno es la de la repatriación de jugadores españoles que militaban en equipos de otras ligas. Así retornó Borja Fernández a Valladolid, una vez cerrada su etapa en India. Aún mas lejos, en el Guangzhou chino, jugaba Míchel Herrero. El atractivo proyecto del Real Oviedo le convenció para regresar a España. No tan lejos, pero en la prestigiosa Segunda inglesa, estaban Marcos Tébar y Sergio Aguza. Los dos exmadridistas probaron fortuna y se decantaron por el retorno, uno a la UE Llagostera y el otro a la SD Ponferradina, donde se reencontraba con su exentrenador en la base blanca Manolo Díaz.