Aridane Santana (Vecindario, 31-3-87) vuelve a casa. Al menos a su segunda casa. En Tenerife estuvo tres años y medio. Se marchó el pasado verano con un sabor agridulce porque, si bien fue uno de los protagonistas del ascenso, con 27 goles, se marchó con el lastre de ser uno de los hombres fuertes del vestuario para Álvaro Cervera. Y quizás por esa imagen de delantero corpulento y algo lento, del que no se valoró un rendimiento extraordinario durante gran parte de su estancia en el club insular. El pasado sábado debutó con la camiseta del CD Mirandés, próximo rival de los blanquiazules.

¿Qué tal en Miranda de Ebro?

La verdad es que muy bien. Me han acogido bien. Llevo solo unas semanas y estoy entrando en la dinámica, cogiendo conceptos, conociendo a los compañeros para saber como se desenvuelven y entender su juego.

Se ha encontrado un equipo que pelea por el "play-off".

Me he encontrado con un grupo de gran calidad futbolística. Ya lo dicen los resultados. Además, es un grupo humano bastante bueno, con gente muy comprometida y que me han tratado genial. Lo he notado desde el primer día.

¿Es un espejismo estar entre los seis primeros de la Liga?

La verdad es que el objetivo es ambicioso, pero lo que se ha ido consiguiendo dice que es posible. Fíjese que es uno de los equipos que más goles hace por poner un ejemplo. Y por lo que he visto, el club no renuncia a nada.

¿Es el Mirandés la viva demostración de que, en Segunda, no todo es tener dinero y un gran estadio?

Como cada año, la Segunda se demuestra que la regularidad es importante, independientemente del presupuesto y la masa social. Cada fin de semana cuesta un mundo ganar partidos, a todos les cuesta, y es emocionante.

¿Está ya readaptado a la competición española?

Siempre cuesta un poco cuando llegas. Y en este caso, llevaba seis o siete meses fuera y tengo que adaptarme aún. Pero el otro día ya jugué un rato, conseguimos un punto y afrontamos ahora este partido con el objetivo de no dejar escapar puntos de Anduva.

Ya lo dice el tópico en estos casos: partido especial.

Es un partido bonito por enfrentarme a un equipo en el que viví tres años y medio, en el que tengo amigos, compañeros... La verdad es que verlos enfrente será bonito. Pero no lo veo como algo malo.

Vamos, que no va a sufrir teniéndolos en el bando rival.

Sufrir no. El fútbol tiene estas cosas, son cambios de ciclo. Prefiero ver el hecho de enfrentarnos y vernos de nuevo como algo positivo. Y luego, desearles suerte...

Estará ya en contacto con ellos.

Suelo hablar mucho con Suso o Ricardo. Ya nos iremos picando durante la semana (ríe).

¿Ha seguido al Tenerife en la presente temporada?

El tiempo que estuve en Tailandia era difícil ver los partidos, por la diferencia horaria, pero leía todo lo que podía, veía los resúmenes y hablaba mucho con ellos. Creo que ahora, después de la victoria ante el Llagostera, está en una zona más tranquilla. Tiene cierta distancia con los de abajo y eso da tranquilidad. Tirarán para arriba.

Pero parece que le cuesta engancharse a la lucha en la que, sin ir más lejos, está el Mirandés.

La igualdad de la categoría juega en contra de muchos equipos que se plantean estar en "play-off" o ascender. Eso demuestra que hay que trabajar cada semana. Da igual el presupuesto o la historia. Llegará un momento en el que el Tenerife lo consiga. El primer año se estuvo cerca. Se escapó en esas últimas jornadas. Pero lo más importante es que el club siga en Segunda.

¡Ay, esas últimas siete jornadas!

Estuvimos muy cerca de luchar por volver a Primera. Nos ilusionamos todos, futbolistas, club, afición... Estábamos en la zona alta siendo recién ascendidos. Pero es que el equipo merecía estar ahí por lo que hacía en el campo. No pudo ser y el año siguiente empiezas con esa historia. No se borró lo que pasó la campaña anterior. Todos queríamos jugar el "play-off", pero los otros también juegan. Pero bueno, el año pasado se logró la permanencia, que era lo prioritario.

¿Qué pasó la pasada temporada?

Fue una temporada muy dura, complicada. El equipo no acababa de encadenar victorias para ponernos en un zona tranquila. No sé, el fútbol tiene estas cosas. Hay temporadas que no salen bien. Quizás hubo muchos cambios, salidas en enero y antes de enero. Todo eso penaliza.

Fue tan dura que decidió irse.

Tenía un año más allí. Pasaron muchas cosas y piensas que es el momento de irte, de cambiar. Si la temporada hubiera sido distinta, si hubiera sido buena colectiva e individual, no sé qué hubiera pasado. Pero era el momento de afrontar un cambio de ciclo. El club se portó increíblemente bien y yo solo tomé una decisión.

¿Se arrepiente?

Entonces fue la decisión acertada. No estaba para seguir en el Tenerife por muchas cosas que pasaron y prefiero no comentar.

¿Tenía claro que quería jugar fuera de España o surgió así?

Sí, quería jugar fuera de España. Han sido siete meses muy buenos. Me tuve que adaptar rápido a la cultura, la comida, la gente y el idioma. La experiencia fue enriquecedora para mi familia y para mí. Conseguí un número de goles importante porque me adapté rápido. Había firmado año y medio. No lo cumplí porque salió este reto del Mirandés.

¿Y por qué el Mirandés?

Cuando alguien quiere que estés, estás. Quería ser partícipe de esto. Carlos Terrazas insistió mucho y acepté.

Firmó hasta junio. ¿Y luego?

Lo que me planteo ahora mismo es hasta junio, ayudar, jugar el máximo posible. Ver qué tal se ha dado y ver qué queremos club y jugador.