Cinco participantes, una medalla de plata y un diploma olímpico fue el bagaje tinerfeño en los recién concluidos Juegos Olímpicos de Río.

Sergio Rodríguez, el "Chacho", elevó el pabellón isleño con una medalla de bronce en el último día de competición. El base de la Selección española de baloncesto fue clave al anotar los dos últimos puntos de la victoria ante Australia.

"Durante mes y medio eché mucho de menos a mi mujer y a mi hija y no podía irme sin ganar algo. No me imaginaba encerrado en la habitación sin la medalla de bronce", destacó el jugador nada más acabar el choque.

El lagunero de El Ortigal se convirtió en la figura tinerfeña más relevante en la historia olímpica. Y es que añadió este bronce a la plata cosechada en Londres 2012. A sus 30 años no es nada descabellado que pueda disputar sus terceros Juegos -y conseguir su tercera medalla en ellos- en Tokio 2020.

La halterofilia dio otra alegría a Tenerife de la mano de Andrés Mata en la categoría de 77 kilos. El lagunero nacido en tierras venezolanas compitió en el Grupo B en Río y, pese a ello, no defraudo. Si bien no mejoró el sexto puesto logrado en la anterior olimpiada, Mata logró un nuevo diploma -fue séptimo- con un nuevo récord de España al levantar un total de 343 kilos.

"Han sido unos Juegos increíbles. La mejor experiencia de toda mi carrera deportiva. Me voy con la satisfacción de haber cumplido mis expectativas. Ahora toca descansar un poco y volver con las pilas cargadas para comenzar este nuevo periodo olímpico que se abre", relató el joven haltera.

En la pretérita cita con los aros, la perdomera Elisabeth Chávez se colgó el bronce, aunque no participó ningún minuto con "las guerreras". En esta ocasión, la Selección de balonmano se quedó a las puertas de la presea. Francia y el arbitraje -la orotavense terminó expulsada- se cruzaron en su camino en cuartos de final. Chávez sumó un diploma olímpico y la satisfacción de haber ayudado desde dentro, con trabajo y goles, a sus compañeras.

"No se ni qué decir. Simplemente, muchísimas gracias de corazón por estar con nosotras en estos momentos", pudo escribir Chávez en sus redes sociales tras el duro varapalo contra las galas.

Repitió experiencia olímpica la santacrucera Alicia Cebrián. "He sido muy constante, disciplinada y profesional. Tengo el fruto al trabajo", aseguraba la regatista antes de los Juegos. Clasificada "in extremis", se quedó más lejos de la "Medal Race" en Láser Radial que en Londres. Acabó en décimo séptimo lugar.

El único debutante de la relación de tinerfeños fue el lagunero Vicente Hernández. El tria-tleta estuvo lejos de sus intenciones y fue vigésimo séptimo. "Lejos de estar contento, me voy tranquilo y con una nueva experiencia. Tuve actitud y empeño en una carrera que pide eso", aseveró.

Cinco tinerfeños que se dejan muchas horas en pos del sueño de los Juegos. Un plano onírico que se vuelve a abrir para ellos con el ciclo olímpico de Tokio 2020.