El alemán Nico Rosberg (Mercedes) logró una victoria agridulce ya que no pudo beneficiarse del hecho de que su compañero y líder del Mundial, Lewis Hamilton saliese desde la última fila de salida de la parrilla, ya que el británico protagonizó una gran carrera que le llevó hasta el podio.

El comienzo resultó caótico. Nico Rosberg (Mercedes) salió muy bien desde la pole, pero los tres siguientes, Max Verstappen, Kimi Raikkonen y Sebastian Vettel, llegaron juntos a la primera curva y un toque dejó el coche del finlandés cruzado y con daños y la obligación de ir a boxes.

Verstappen también vio como se dañaba su alerón, mientras que Carlos Sainz, que pasó de la decimocuarta posición a la séptima, sufrió un pinchazo que le obligó a retirarse en la segunda vuelta. Estas dos primeras vueltas motivaron la presencia del coche de seguridad virtual.

En la vuelta 6 llegó al accidente de Kevin Magnussen (Renault) que revolucionó la carrera, ya que, aunque en principio salió el coche de seguridad, en la décima vuelta una bandera roja paró la carrera para reparar los desperfectos causados en las protecciones por el accidente.

Pero antes de todo esto, destacó la remontada de Fernando Alonso (McLaren) desde la penúltima plaza de la parrilla hasta la novena seguido por Lewis Hamilton (Mercedes). A ello se unió que las entradas de otros pilotos a cambiar neumáticos derivó en que al parón de la carrera Alonso y Hamilton llegaron en cuarta y quinta posición, respectivamente.

Tras la reanudación, Rosberg mantuvo la posición, pero Hamilton se convirtió en una amenaza, ya que pronto superó a Alonso hasta situarse tercero y pugnar con Daniel Ricciardo (Red Bull) por la segunda plaza, si bien ya no pudo con el australiano y tuvo que conformarse con ser tercero, lo que fue un gran premio tras salir desde el fondo de la parrilla.

Alonso fue otro de los protagonistas destacados de la carrera y, aunque desde la cuarta posición fue cayendo a la séptima por la inferioridad de su monoplaza, recuperó 15 posiciones desde la salida.