Adrián Trujillo fue el hombre más aplaudido este domingo en la plaza de la Catedral, al final de la Vuelta Ciclista a Tenerife, no en vano el corredor del Loro Parque ganó etapa que cerraba la ronda, subía al podio como tercer clasificado y se hacía con el jersey blanco de mejor canario.

Adrián Trujillo explicaba aún emocionando por lo vivido que "desde que gané la cronoescalada, que fue una sorpresa, ya dije que había preparado la carrera para quedar lo más arriba posible en la general, sin embargo hasta el Teide estuve luchando con el líder y eso no lo esperaba".

"El viernes por la tarde viví el peor momento cuando sufrí una caída. Pero pude salvar la etapa gracias a mi equipo".

Pero el segundo día el ciclista del Loro Parque volvía a sonreír: "El sábado recuperé puestos y hoy era el todo o nada. Ayer me quedé a 30 segundos del podio y la cuestión este domingo era morir con las botas puestas".

Si el viernes la labor del equipo fue clave para llegar a la meta de Arafo tras la caída, este domingo era un compañero el que ponía a Trujillo camino de la victoria.

"Me marché bajando junto a Unai Yus, que ha hecho una labor impresionante. En las primeras curvas abrimos un hueco, aprovechamos que la gente de fuera no conoce el terreno tan bien como nosotros y nos pudimos marchar. En Tegueste, Unai se abrió y me dijo que tirase a muerte, así lo hice, sin mirar atrás, y llegando a meta entraba mucho aire de cara y se me hizo eterno", explicó el corredor.

También reconoció que "el primer puesto es indiscutible para Iván, que ha estado muy fuerte. De hecho cuando me caí el viernes ya él me había descolgado. Lo que sí creo es que no haber mediado esa caída quizá hubiese estado más cerca del segundo puesto. Pero estoy muy contento porque he ganado dos etapas, subido al podio como tercero de la general y soy el primer canario", resumió Adrián.