Aitor Sanz, uno de los fichajes más rentables de los últimos tiempos en el CD Tenerife, seguirá al menos una temporada más. En su última negociación, quedó fijada en su contrato una cláusula de renovación automática en el caso de que lograra participar en 50 partidos de manera importante (se suele fijar en este tipo de acuerdos que sean más de 45 minutos) durante las dos temporadas que recogía su nuevo vínculo. Ya el pasado curso disputó 38 encuentros (uno de Copa), siendo titular en 36 jornadas ligueras.

Su presencia en el once resulta tan habitual que solo ha necesitado las primeras jornadas del presente Campeonato para alcanzar la meta de la prolongación de contrato. De los 16 partidos oficiales (2 de Copa) solo se perdió uno por sanción. En los restantes fue, como ha sucedido casi desde su llegada, uno de los fijos. "Ahora lo que me preocupa es el equipo", dijo eludiendo ayer la cuestión.

El mediocentro madrileño no quiere distraerse con algo que ha llegado fruto del trabajo, camino que también considera el adecuado para resolver la situación clasificatoria del Tenerife. "Falta mejorar en aspectos individuales de cada uno. Es raro el jugador que esté en su mejor momento", alumbró agregando que "es una falta de confianza de cada uno que debemos superar con la llegada de buenos resultados". En este sentido, volvió a pedir "tranquilidad", puesto que considera este momento "un bache" que ya "se ha superado otros años".

La confianza de Aitor se basa en que, pese a no jugar bien ante el Numancia, "el equipo compitió y lo dejó todo" en el campo. "No hay ningún jugador al que se le vea pasota. Corremos y metemos el pie, no nos arrugamos. Lo que pasa es que cuando las cosas no salen, te entran dudas. Donde antes los espacios eran claridad ahora parecen más pequeños y tiemblan las piernas. Pero cuando ganemos un par de partidos tendremos más confianza y funcionaremos de otra manera", vaticinó.

Para mantener la fe en una remontada clasificatoria, recurrió a que "la igualdad es máxima" en Segunda, por lo que "ganando dos partidos estás arriba y tres jornadas sin ganar te ves con nervios mirando hacia abajo".

Más sustituido este curso que en los tres anteriores

Ocho veces ha decidido José Luis Martí sustituir a Aitor Sanz en las trece jornadas ligueras que ha disputado. El dato no se puede pasar por alto, teniendo en cuenta que ya es más que en las tres temporadas anteriores del mediocentro como blanquiazul (seis en la 13-14, cinco en la 14-15 y seis en la 15-16). "El equipo este año tiene mejores alternativas y el míster es el que decide", se limita a exponer uno de los capitanes del Tenerife, que sigue considerando que la actual es "mejor plantilla que la del año pasado, con más fondo". Da tregua así a su entrenador, pese a circunstancias como la del pasado fin de semana ante el Numancia. "Lo importante es ganar al UCAM, que es uno de esos partidos con ambiente enrarecido si no ganamos". Los futbolistas lo sabe y eso les lleva "a tener más ansiedad pero debemos manejarla".

El mediocentro no ve grandes problemas de funcionamiento más allá de "la falta de confianza", puesto que los jugadores son capaces de "hacer cosas distintas y aprovechar los defectos del rival".

Estreno del Campo 1

El Tenerife regresó ayer a los entrenamientos y lo hizo en el Campo 1 de la Ciudad Deportiva Javier Pérez, que estrenaba césped para la presente temporada después de varios años sin ser utilizado para la práctica del fútbol. Los blanquiazules repetirán hoy y mañana.