Ganar y recuperar sensaciones eran los objetivos del Iberostar Tenerife ayer ante la Cibona de Zagreb. Los dos objetivos se cumplieron ante un rival que está permitiendo que esta competición, la Basketball Champions League, pierda algo de seriedad.

Y es que el equipo croata se desplazó a la Isla sin cuatro de sus titulares, como si este partido no le interesase. Estos cuatro titulares se quedaron en su país para descansar por la carga de encuentros que llevan, dando prioridad a otras Ligas que están disputando.

Ayer, el Iberostar Tenerife hizo su trabajo. Le costó al principio porque no salió con la intensidad necesaria, pero cuando apretó y acertó en los lanzamientos exteriores, marcó rápidamente las distancias.

Davin White fue, sin duda, uno de los protagonistas del choque. Encadenó dos triples consecutivos en el segundo cuarto para poner el marcador en la máxima ventaja hasta el momento (45-36), pero sería en el tercer cuarto cuando levantaría de sus asientos a un público dormido tras encadenar tres triples más (67-42), que obligaría al entrenador de la Cibona a solicitar dos tiempos muertos en dos minutos.

Antes, Iberostar Tenerife y Cibona de Zagreb empataban en casi todo. El cuadro insular buscaba a Bogris en el interior con acierto, mientras que la Cibona intentaba atacar verticalmente y con éxito la canasta local.

Sería en el minuto 13 de partido cuando el conjunto croata avisaría al ponerse tres arriba en el marcador (26-29), pero un tiempo muerto de Vidorreta y ajuste defensivo sirvió para cambiar de nuevo la dinámica del partido.

Poco a poco el conjunto canarista empezaba a marcar distancia. Seguía insistiendo en los lanzamientos exteriores y en esta fase tuvo fortuna y alcanzar los diez puntos antes del descanso (48-38).

El Iberostar Tenerife sorprendió a la Cibona al colocarse en zona. Parcial de 7-0 (55-38) y el inicio del despegue local. Fue un espectacular Davin White quien terminó de "romper" el choque anotando esos tres triples consecutivos para poner el marcador en 67-42.

A partir de ese momento poco más que decir del choque. El entrenador del Cibona, Ivica Buric, decidió dar descanso a su mejor hombre, el base Reynolds, y jugar con los jóvenes.

El último cuarto sirvió para que la Cibona maquillara el marcador ante un Iberostar Tenerife que bajó los brazos y empezó a jugar más para la grada y con Abromaitis acompañando en aciertos a White.

En estos últimos instantes del partido hubo minutos para que tanto Petit como el vinculado Omeragic tuvieran minutos de juego y aportaran cuatro puntos cada uno.