60-70

iberostar tenerife-herbalife g. canaria

Está claro que la derrota tenía que llegar en algún momento, pero ayer no era el mejor posible. El Iberostar Tenerife no jugó bien, defendió bien, estuvo intenso, pero le faltó fluidez ofensiva y acierto ante un Herbalife Gran Canaria que llegó al límite en su defensa y permitido por el trío arbitral que se equivocó en la jugada más determinante del partido cuando el equipo tinerfeño, a falta de 1,24 segundos, se había puesto a seis puntos.

Una antideportiva señalada a Davin White (58-64) acabó con las opciones del conjunto insular que, al menos pudo mantener el basket-average a su favor, ya que en el Gran Canaria Arena había ganado por once puntos (81-92).

El conjunto de Vidorreta hizo un buen trabajo atrás, sin duda, pero si no está acertado en ataque difícil es que pueda ganar y más a un rival de la calidad y potencial del Herbalife. Ayer, el Iberostar tuvo una media de acierto de tres puntos del 16 por ciento cuando la media a lo largo de la temporada estaba en 38. Ha sido la segunda peor marca esta temporada.

El Iberostar Tenerife empezó bien el partido. Mantuvo su buena dinámica defensiva, mientras que en ataque encontraba alternativa ante la defensa visitante.

Ante la imposibilidad de tirar desde el exterior ante una defensa muy arriba del Herbalife Gran Canaria, utilizaron el "plan B", que no era otro que buscar penetraciones y doblar balones al pívot. En esta ocasión era Vázquez y su aportación fue excelente, anotando, doce de los primeros 17 puntos de su equipo. Los aurinegros dominaban el marcador (17-13) y lograron irse al primer parón con ventaja (21-17).

En el inicio del segundo cuarto se mantuvo la dinámica del primer cuarto. Davin White lo intentó de tres y acertó (24-17) y eso animó a sus compañeros que cuatro minutos después alcanzarían la mayor ventaja para los laguneros (30-23, min.16).

Luis Casimiro, entrenador del Herbalife, decidió entonces parar el partido con un tiempo muerto para reorganizar a su equipo.

Vidorreta aprovechó también para hacer algunos cambios y dar refresco a los titulares. Fue el principio del fin de los canaristas.

Mientras los locales no aportaban nada en ataque, el equipo grancanario empezó a encontrar mejores posiciones de tiro y a anotar.

El marcador empezó a ajustarse más. De ese 30-23 se pasó al 30-28 y más adelante al 30-40. Un parcial de 0-17 que los tinerfeños no supieron frenar. Kuric, con dos triples, fue siempre una amenaza para la defensa del Iberostar. Doornekam, a poco de llegar al descanso, rompería esa sequía anotadora para llegar al 33-40.

El tercer cuarto fue clave. Fue tan dura la defensa del Herbalife Gran Canaria en el inicio que en solo en un minuto los grancanarios ya tenían cuatro faltas acumuladas. Pese a todo, no bajó su intensidad y mantuvo las diferencias en el electrónico ante la falta de acierto local.

Ni los cambios ni los tiempos muertos de Txus Vidorreta conseguían cambiar la dinámica del choque que, pese a todo, no estaba roto (44-53, min.29).

Kirksay lo intentó y acertó de tres puntos en el inicio del último cuarto (47-55), pero respondió Oliver con otro. No había forma de darle un giro al partido hasta que Vidorreta se jugó el último cartucho a falta de cuatro minutos para el final.

Dio entrada a Doornekamp y a White en busca de poner peligro exterior y eso fue aprovechado por Bogris para anotar.

Las ganas que puso el equipo local en los instantes finales hicieron que el partido se ajustara hasta el 58-64, a 1,24 para el final, momento en el que llegó la antideportiva de White, protestada por entrenador local y que terminó de decidir el choque a favor de los visitantes.