El 18 de marzo de 1997, el tinerfeñismo celebró un triunfo histórico, el 0-2 en el estadio Parken de Copenhague correspondiente a la vuelta de los cuartos de final de la desaparecida Copa de la UEFA.

El equipo entrenado por Heynckes se vio obligado a remontar el 0-1 registrado en el Heliodoro (gol de Sand) el 4 de marzo. Y lo consiguió. En el camino ya había superado al Maccabi Tel Aviv, Lazio y Feyenoord, y apuró la prórroga para eliminar al conjunto danés gracias a un tanto de Antonio Pinilla en el minuto 20 y a otro, el que finalmente pasó a la historia por el momento y su ejecución, de Antonio Mata cuando quedaban solo 180 segundos para que concluyera el tiempo extra y el duelo se decidiera en los penaltis. El defensa malagueño aprovechó una falta en la frontal del área, cometida sobre Kodro, para batir al portero Krogh con un potente disparo cercano al poste, rebasando la barrera por un lado.

Aquella noche, Heynckes alineó de inicio a Ojeda, Llorente, Antonio Mata, Ballesteros, Motaung, Jokanovic, Chano, Neuville, Vivar Dorado, Pinilla y Juanele, y accedieron al campo como reservas Kodro, Pablo Paz y Alexis Suárez.

La siguiente parada europea de los blanquiazules resultó ser la última, ya que el Tenerife no pudo con el Shalke 04, vencedor en su cruce previo con el Valencia y también en la final ante el Inter.

Tras el éxito logrado en Dinamarca, Heynckes situó la clave en "la predisposición de los jugadores, su preparación, su concentración y su convicción de pasar". Al día siguiente, en medio del cálido recibimiento que le ofreció la afición en Los Rodeos, se mostró más eufórico. "Ahora, en toda Europa, la gente sabe que Tenerife no solo es una Isla para venir a disfrutar de unas vacaciones". Por su parte, el ocupante del banquillo local, Ebbe Skovdahl se limitó a reconocer que su oponente había sido "mucho mejor" que el Brondby.

En el palco fue testigo de la hazaña del representativo el presidente de esa etapa, Javier Pérez, quien calificó lo sucedido como "algo histórico", y admitió que pudo seguir el partido "con mucha tranquilidad" por el excelente rendimiento del equipo tinerfeño. "Hemos logrado una victoria importantísima. Esto tardará mucho tiempo en borrarse de nuestras retinas. Hay que felicitar a todo el Tenerife, pues es una victoria de toda la afición", remarcó Pérez.

Por su parte, el gran protagonista del encuentro, Antonio Mata, explicó las claves del momento crucial. "Fue una jugada ensayada desde hacía tiempo que solíamos hacer todos los domingos. No habíamos tenido mucha suerte, pero esta vez sí la hubo. Le dije a Jokanovic que parara el balón, que yo la metía, y así fue. Es un gol que se me va a quedar grabado toda la vida. Uno sueña con estos partidos, y la verdad es que cuando eres pequeño y vives esto, no crees que te pueda suceder", manifestó.