El español Kilian Jornet ha alcanzado la pasada madrugada la cima de Everest en una sola subida a través de la cara norte de la montaña sin la ayuda de oxígeno y cuerdas fijas, según ha confirmado el propio montañero en sus redes sociales.

Kilian llegó a la cumbre a través de la cara norte de la montaña más alta del mundo (8,848 metros) siguiendo la ruta tradicional y, debido a su concepción purista del alpinismo, con el material más ligero posible y sin ningún tipo de ayuda de oxigeno y cuerdas fijas.

El deportista catalán comenzó el desafío en el campamento base del Everest, cerca del antiguo monasterio de Rombuk (5.100 metros), y 26 horas después, desde el campamento base avanzado a 6.500 metros, confirmó el ascenso.

"Hasta que llegué a 7.700 metros me sentía bien y estaba yendo de acuerdo a mi planificación, pero allí empecé a sentir dolor de estómago. Supongo que debido a un virus estomacal. Desde allí me he movido lentamente y parando cada par de pasos para recuperarme. Sin embargo, hice cumbre a medianoche", confiesa el deportista.

Debido a esta indisposición, Kilian Jornet eligió para concluir el intento permanecer en el campamento de base avanzado y no volver a Rongbuk como estaba planeado.

Con el Everest, Kilian Jornet culmina su proyecto personal Summits of My Life (Cimas de mi vida) que le ha permitido viajar por todo el mundo intentando establecer récords de ascenso en algunas de las montañas más icónicas del planeta.

Empezó en la cordillera del Mont Blanc en 2012 y desde entonces ha escalado montañas en Europa (Mont Blanc y Cervino), en América del Norte (Denali) y en América del Sur (Aconcagua).

Esta es la segunda vez que intentaba el ascenso al Everest, ya que la expedición se tuvo que posponer en septiembre del 2016 debido a las malas condiciones meteorológicas.