Gaku Shibasaki ofreció ayer su cuarta rueda de prensa como jugador del Tenerife, la primera posterior a un entrenamiento. Ayudado por una traductora, su profesora de español en la Isla, Solange, el jugador japonés contó, entre otras cosas, que su margen de mejora es amplio y que no se plantea objetivos personales a largo plazo: ni volver a la selección para participar en el Mundial de Rusia ni cambiar de club o quedarse en el blanquiazul tras las vacaciones de verano. No obstante, aseguró que se siente "muy feliz" en su actual destino profesional, así que no descartó continuar en Tenerife la próxima campaña.

Después de enlazar cinco jornadas siendo titular, Shibasaki confesó que nota que va "mejorando poco a poco", aunque aclaró que no se conforma con el rendimiento que está ofreciendo. "Todavía puedo dar mucho más", garantizó. De momento, Martí lo ha situado como mediapunta y también como interior. Al respecto, apuntó que no tiene preferencias. "En cualquier puesto me lo paso bien", reveló.

En cualquier caso, atrás quedaron los días en los que daba la impresión que su falta de adaptación le iba a impedir triunfar en el Tenerife. Con el paso de las semanas, su situación ha dado un giro. A su juicio, la clave ha sido futbolística. "He podido acostumbrarme al juego que se practica en España", explicó Gaku, que antes de fichar por el club tinerfeño el pasado mes de enero había desarrollado toda su carrera en su país natal. Y las diferencias entre lo que conocía y lo que ha descubierto en Tenerife, no son pocas. "En España se dan más pases de lo que pensaba y el tiempo de posesión es más alto", comentó para referirse luego al método de trabajo de los entrenadores. "Los españoles son más apasionados a la hora de expresarse. Los técnicos de aquí gritan más que en Japón".

Otro factor que separa los dos ámbitos en los que ha trabajado es el que tiene que ver con los seguidores. Gaku tuvo la oportunidad de comprobarlo cuando el público asistente al Heliodoro en el partido de su debut, el de la derrota con el Reus, le dedicó una ovación en el instante de salir al campo. "La manera de animar de los españoles me hace feliz".

Shibasaki también habló sobre la relación con sus compañeros. Con la barrera del idioma cada vez menos difícil de superar, el futbolista indicó que su relación con sus compañeros "es muy buena", entre otras cosas porque "todos son muy amables". Y en el plano deportivo, destacó la "técnica" que caracteriza a los blanquiazules.

Shibasaki dejó claro su grado de implicación al poner por detrás del triunfo en Alcorcón su aportación goleadora en la jugada del 0-2. "Aunque marqué un tanto, lo que más me hizo feliz fue que el equipo ganara. Eso fue lo más importante".

Con vistas a las próximas semanas, se mostró convencido de que el Tenerife es el "más fuerte" de los candidatos a disputar la promoción de ascenso. Y avanzando un poco más en el tiempo, mantuvo en el aire la duda sobre su presencia en la plantilla tinerfeña de la próxima campaña. Shibasaki se comprometió solo hasta junio, pero el ascenso del equipo a Primera aumentará considerablemente la posibilidad de que siga en el club. En este asunto también fue cauto. "No sé qué va a pasar en el futuro, pero ahora mismo me encuentro muy satisfecho en este equipo y quiero darlo todo", dijo. En términos similares se manifestó cuando fue consultado sobre sus aspiraciones de regresar a la selección. "No pienso en eso. Lo que me hace feliz es jugar con el Tenerife. No me preocupa lo que vaya a pasar en el futuro. Mi objetivo es seguir luchando aquí", advirtió Gaku, a quien le gusta "pasear, disfrutar de los paisajes de la Isla y ver fútbol" en su tiempo libre.

Su cuarta rueda de prensa en el Tenerife

Había atendido a los medios de comunicación el día de su presentación y después de los partidos con el Oviedo y el Alcorcón. Shibasaki se estrenó ayer en la sala de prensa de El Mundialito. / m. s.