José Luis Martí vivió una de sus mejores noches como entrenador del Tenerife. Seguramente, las más satisfactoria. Había asegurado durante la semana que notaba mucha seguridad entre los jugadores, y siempre defendió las opciones del equipo blanquiazul de llegar a la final por el ascenso.

"Cuando se sufre de esta manera, se disfruta más. El equipo se vació, nos faltaron fuerzas en momentos puntuales", comenzó diciendo el entrenador local, quien destacó el valor del puesto logrado en la clasificación. "Era importante quedar lo más arriba posible en la clasificación. Queríamos esa ventaja, la buscamos y nos ha servido. Lo habíamos pensado y lo dijimos, pero no sabíamos que iba a pasar esto. Lo importante es que estamos en la final para subir a Primera. Estamos orgullosos de los chicos y del público".

Respecto a las claves del choque, admitió que hasta la suerte estuvo del lado local. "El equipo tuvo esfuerzo, trabajo, solidaridad... Pero también tuvo fortuna, porque el Cádiz creó ocasiones y pudo marcar un gol que nos habría mandado para casa. Habría sido injusto que cualquier de los dos quedara eliminado, pero estamos orgullosos de seguir adelante", explicó.

Por otra parte, explicó por qué se decidió por el "once" que enfrentó al Cádiz. "Buscamos refresco, otras ideas, la posibilidad de emparejar a los dos centrales con los delanteros para que no existieran coberturas y poder darle libertad a Gaku y que no estuviera vigilado. El Cádiz nos presionó bien, no nos dejó maniobrar, pero supimos encontrar espacios y jugamos con la intensidad, el corazón y la pasión que siempre le pedimos a este equipo".

Asimismo, destacó que el Tenerife supo leer las fases del choque. "Interpretamos que si no podíamos jugar el balón más pausado, debíamos ser capaces de hacerlo en largo. Lo leímos bien. Los dos delanteros se vaciaron y nos dieron alternativas. Estuvimos muy correctos y disciplinados, y el equipo le puso ese corazón que les pedí en la prórroga, algo que ya habían demostrado durante toda la temporada; y con el público arropando, lo conseguimos", declaró.

En cuanto a la aportación goleadora de Gaku Shibasaki, no ocultó su satisfacción por el acierto del japonés. "Le correspondió a él. Tiene calidad y no se pone nervioso. Nos da pausa y tranquilidad, ve a los compañeros, los espacios. Lo ve como algo natural".

Martí no pasó por alto la respuesta de los aficionados. "Ver el estadio así, el mosaico, a los voluntarios colocando las cartulinas... Fue extraordinario, algo que no se vivía desde hacía mucho tiempo. Pero les pediría un último esfuerzo, que en estos días cuelguen sus bufandas y las banderas porque así nos van a hacer creer más", solicitó el mallorquín.

Pensando en el partido de ida de la final por el ascenso a Primera, José Luis opinó que el esfuerzo realizado ayer por el Tenerife podría pasarle factura a sus jugadores, aunque no quiso buscar excusas. "Va a influir bastante, pero cuando hacemos cambios, prácticamente no se nota. Vamos a trabajar y el miércoles veremos qué jugadores ponemos en el equipo titular con la frescura que hace falta un partido como este, sabiendo que quedará la vuelta", manifestó. "Seguramente, el Getafe vendrá a imprimir ritmo, porque tendremos un día menos de descanso y jugamos una prórroga", avisó.