La UD Las Palmas no ha empezado bien la temporada. A las dos derrotas sufridas ante Valencia (1-0) y Atlético de Madrid (1-5) hay que unir la espantada de una de sus estrellas, Kevin Prince Boateng, la salida de Roque Mesa, la falta de acuerdo para renovar a Jonathan Viera, el retraso en los últimos fichajes y, sobre todo, dos actos de indisciplina que han terminando hartando a la afición amarilla.

La pasada semana fue Tana el acusado de ser identificado hasta en dos ocasiones por la Policía al participar presuntamente en una trifulca a la salida de una discoteca de la capital grancanaria y a altas horas de la madrugada. "Un jugador no puede cometer estas tonterías", dijo el presidente Miguel Ángel Ramírez, reprendiéndole en público y anunciando que se le sancionaría.

Ahora es su capitán, Aythami Artiles, el que se convierte en noticia al haberse negado el pasado sábado a realizar una sesión de entrenamiento en el gimnasio con los no convocados. Según informa el diario As, el central no quiso trabajar porque ya lo había hecho por la mañana. "En ningún momento me he negado a entrenarme. Ya está bien de que se siga manchando el nombre de los jugadores y la imagen del club con noticias que no son contrastadas", dijo ayer visiblemente molesto con esta información el futbolista amarillo.

"Si eso fuese cierto, el club me habría abierto expediente y me hubiera puesto una multa. El sábado entrenamos por la mañana y por la tarde tocaba gimnasio; yo tenía la espalda cargada y me quedé con el fisioterapeuta", ha querido aclarar Aythami que pidió "paciencia" a su hinchada.