El Real Valladolid le ha dado otro vuelco a su plantilla buscando cuajar un equipo con el que poder competir en la zona de ascenso. No parecen haber dado con la fórmula tampoco este año. Antes al contrario, el nuevo proyecto pucelano, con el peso de sus 17 incorporaciones y que añade de manera sustancial el cambio de entrenador, parece haber dar como resultado un equipo de perfil más bajo que el de las últimas campañas. El asunto, de manera concreta, se puede medir en el área contraria. El entorno pucelano ha vivido con el alma en vilo la última semana de mercado esperando la llegada de un delantero, de un goleador, de un referente para este nuevo equipo. La aspiración fue siempre Raúl de Tomás, que por fin en el último tramo de la pasada campaña empezó a dar el nivel que se intuye en un jugador de su potencial. A De Tomás lo tendrán de rival, en Vallecas. Ese ansiado refuerzo no llegó, o al menos no terminó de llegar, porque la tardía cesión de Alfredo Ortuño aún debe ser validada por LaLiga, si acaso.

El "caso Ortuño" condiciona la esperanza pucelana en estas horas. El director deportivo de la Las Palmas, Toni Cruz, cree que LaLiga aceptará la cesión, pero el asunto no está claro. Se inscribió pasada la medianoche peninsular, aunque en hora en Canarias...

Y a falta de Ortuño, Jaime Mata, que ya fue el autor de los dos goles en la victoria del pasado domingo ante el Sevilla Atl. o bien Ibán Salvador u Oscar Plano, estos dos en el escalón anterior al gol (mediaspuntas). A Luis César Sampedro le queda Villalibre, un filial del Athletic que acaba de llegar cedido, poca cosa frente a las aspiraciones de contar con un jugador de más de 15 goles. O sea, que si finalmente no puede sumar a Ortuño a la plantilla, la falta de delanteros pesará como un estigma en este equipo que, aún hoy sin Calero y Gianniotas, se parece muy poco al del año pasado.

Casi todas son caras nuevas, desde el portero, Masip, pasando por la defensa, a elegir Antoñito, Kiko Olivas, Deivid, Nacho, recalando en la experiencia de los pivotes, Borja y Luismi, a los que hacen competencia Sulayman, Míchel y Cotán, hasta llegar a la zona de tres cuartos, para mezclar desborde y trabajo con el ausente Gianniotas y los Hervías, Óscar Plano, Marcos, Villalibre o Toni. Un equipo diferente, con un entrenador peculiar, que va a necesitar tiempo en su idea de apostar por el riesgo en esa zona "suicida". Sobre todo si no llega Ortuño.

Balance muy favorable del Tenerife contra Luis César

Los antecedentes de las visitas del Tenerife al nuevo Zorrilla no son los mejores, pero sus enfrentamientos ante los equipos de Luis César Sampedro reflejan una tendencia diferente. El técnico se ha medido al Tenerife como entrenador 14 veces en Liga (con Racing de Ferrol, Poli Ejido, Albacete y Lugo) y solo ha ganado 3, con 4 empates y 7 derrotas. Además, en la Copa del rey, el Tenerife lo eliminó dos veces, en el Ejido y en el Lugo.