La sanción de Toni Ayala, primer entrenador del Granadilla Egatesa, ha situado en un primer plano a su ayudante, Ayoze Díaz, quien ha sido testigo desde la banda del decepcionante comienzo de Liga del representante tinerfeño en la máxima categoría del fútbol femenino. Entre otras cosas, el exfutbolista del Tenerife afirma que la falta de acierto en la finalización de las jugadas ofensivas ha condicionado al conjunto blanquiazul, y se muestra contundente a la hora de defender la continuidad de Ayala al frente del grupo.

¿Qué supone un arranque que difiere de lo esperado?

Es una situación difícil, más que nada por los resultados. Nos hubiese gustado tener algún punto más. Ahora toca sumar para lograr los puntos que no hemos sacado hasta ahora.

En el mercado de verano, desde la directiva se intentó dar respuesta con fichajes a las pretensiones del cuerpo técnico. ¿Supone eso una mayor carga de presión para los técnicos?

Es un privilegio, no nos supone un problema. Tenemos el lujo de poder trabajar con jugadoras muy buenas. Las conclusiones las debemos sacar al final de la temporada. Estamos en el principio de la Liga.

La calidad de la plantilla es latente. ¿Cree qué falta tranquilidad a la hora de afrontar los partidos?

En algunos momentos hemos tenido falta de acierto de cara a la portería. Hemos dispuesto de innumerables ocasiones para hacer goles y no hemos sabido materializarlas. El hecho de no acertar nos ha creado cierta ansiedad. Ahora bien, los equipos contrarios también juegan y han estado más acertados que nosotros.

¿Se podría decir que el condicionante de este mal arranque es la falta de fortuna en los metros finales?

Yo creo que sí, aunque hay que corregir cosas. Siempre hay que hacerlo. No obstante, mirando los partidos uno por uno, el desaprovechamiento de acciones de gol nos ha condicionado. Quizás el partido frente al Levante fue cuando estuvimos peor, y aún con todo, rozamos el empate.

Noelia Gil afirmó en la edición de EL DÍA del pasado lunes que la plantilla se ha contagiado de la presión. ¿Qué importancia le atribuye a esa consideración?

Son solo cuatro jornadas, pero es cierto que el hecho de verte por detrás en el marcador supone un gran hándicap en lo psicológico. Así ha sido en dos jornadas. Debemos saber manejar mejor los tiempos y permanecer tranquilas.

En base a lo que nos comenta, ¿incidirán en el apartado mental en las sesiones preparatorias?

Es importante profundizar en el aspecto psicológico de las chicas, y más después del batacazo que supuso perder por 0-5. Hay que partir de la premisa de que llevamos solo cuatro jornadas. Tenemos mucho margen de mejora aún. Siendo positivos, llegaremos a la senda de las victorias.

Refiriéndonos al vestuario y tras este mal comienzo, ¿la cohesión entre la plantilla y cuerpo técnico se ha quebrantado o sigue intacta?

En ningún momento se ha perdido esa armonía, aunque somos conscientes de que se le debe dar la vuelta a la situación. Para mí, la clave radica en ganar un partido. Así estarían más tranquilas y podríamos trabajar mucho mejor. Desde el cuerpo técnico preparamos los partidos y les damos los conceptos. Luego son las jugadoras, muchas veces, de las que depende el ganar o perder. Queda mucho y somos capaces. Estoy convencido de que si seguimos trabajando así, saldremos adelante.

¿Ha visto Ayoze Díaz, tras este mal inicio, una oportunidad de pasar a ser primer entrenador del Granadilla Egatesa?

No. Ayoze Díaz es el segundo, aunque me estoy preparando para algún día ser primer entrenador. Ahora no es el momento. En ningún momento he percibido que vayan a despedir a Toni Ayala. Todo lo contrario. Ha hecho un gran trabajo durante estos años y dispone de toda la confianza de la directiva.

Al inicio de la temporada se centraban las miradas en clasificarse entre las ocho primeras. ¿El objetivo de Copa de la Reina ha cambiado?

Aún es pronto. Con cuatro partidos no se pueden sacar conclusiones. La diferencia puntuativa es minúscula. Aunque tenemos muy claro que nuestro objetivo debe ser el de mantener la categoría. No debemos meternos más presión. El hecho de estar en Copa ha sido siempre un premio.