Gary Neal, el que fuera jugador de los Spurs, maniató al Iberostar Tenerife. Los 32 puntos del alero americano, unidos a la excelente dirección del joven Sergi García, pudieron con un conjunto de Nenad Markovic que estuvo arriba en el marcador hasta el minuto 27.

Los tinerfeños sufrieron así su cuarta derrota de la temporada al caer por 89-77 en el Príncipe Felipe. Y eso que llevaron el peso del encuentro en el primer período, logrando marcharse al descanso con un resultado de 32-40. Pero todo cambió cuando Neal saltó a la pista en la segunda mitad con un aire renovado y se echó el equipo a las espaldas para dar un auténtico recital, algo que no se veía desde hace años en el pabellón maño. El parcial de 32-21 para el Zaragoza en el último cuarto fue determinante para que la diferencia fuera aún mayor.

Pese a que el conjunto lagunero llevaba ocho días fuera de la Isla por sus partidos en Europa y Liga Endesa, salió a la pista mucho más metido que el equipo aragonés. Con una defensa presionante que impidió anotar al Tecnyconta desde lejos en el primer cuarto, los canarios consiguieron mandar en la pista merced al acierto exterior de Richotti y por encima de todo del polaco Ponitka.

Este acierto y su gran eficacia en el rebote de ataque permitió al Iberostar Tenerife llegar al intermedio con un 32-40 que definía lo que había ocurrido en el parqué en esos primeros veinte minutos. A los cuatro minutos un 6-11 campeaba en el marcador, con una escuadra aurinegra que jugaba cómoda y que llevaba el mando.

Abromaitis se sumó a la fiesta para colaborar con sus canastas. Así, el Iberostar se mantuvo con ventaja en el marcador, aunque el Tecnyconta llegó a situarse a un punto, 16-17, al final de los primeros diez minutos.

El segundo cuarto arrancó con un parcial de 0-8 para los visitantes, que llevaba el 16-25 el marcador tras una canasta del debutante Llompart. La ventaja visitante llegó a los doce puntos poco después (18-30) y el Iberostar fue poco a poco poniendo los cimientos de la victoria en el Príncipe Felipe. El arreón del Tecnyconta en el tramo final del primer tiempo solo le sirvió para reducir ligeramente la brecha en el marcador para dejarla en ocho puntos.

Parecía derrotado el equipo aragonés, que solo fue capaz de anotar en los veinte primeros minutos debajo del aro, gracias a la potencia de Varnado y Nikola Dragovic. Pero todo cambió en el tercer cuarto. Neal, que había llegado al intermedio con solo dos puntos, con -2 de valoración y con tres faltas, asumió el rol de líder y firmó 16 puntos en este tercer cuarto, 10 de ellos de forma consecutiva.

Así, el equipo de Jota Cuspinera, que llegó a ir perdiendo de doce puntos, 34-46 en el minuto 25, consiguió alcanzar el final del tercer cuarto con 56-56. El choque había dado un giro completo y el Iberostar Tenerife se sentía totalmente desbordado cuando minutos antes parecía tenerlo todo bajo control.

En el último período, llevado por la inercia de Neal y por el alma y el descaro del joven base júnior Sergi García, el equipo aragonés firmó un total de 33 puntos, fusilando a triples a un conjunto tinerfeño que se vio impotente. El equipo de Nenad Markovic no encontró en ningún momento la manera de reaccionar ante la fuerte presión de un rival que iba lanzado y al que le salía todo.

El partido no tiene otra lectura si Neal no pide el balón en el tercer cuarto y lo hace todo solo. Anotar y dar asistencias a sus compañeros. Sin él no hay base lógica para explicar lo que sucedió en el Príncipe Felipe. El conjunto tinerfeño dio una sensación de firmeza y fortaleza mayor que la del equipo local en líneas generales. Pero el Iberostar Tenerife terminó el choque totalmente desquiciado y el mejor indicador es que el teórico defensor de Neal, Nicolás Richotti, fue eliminado por cinco faltas en los últimos instantes. Neal acabó con un triple desde ocho metros con el público totalmente volcado en el Príncipe Felipe, algo que no se veía en el pabellón maño desde años.