A rey muerto, rey puesto. Con total diligencia, el CB Canarias cambió de técnico en la tarde de ayer. Segundos mediaron entre el anunció del acuerdo con Nenad Markovic para que dejara la entidad y la notificación de la llegada del griego Fotis Katsikaris.

A lo largo de todo el día de ayer, el gerente y director deportivo del Iberostar, Aniano Cabrera, estuvo tratando de cerrar ambas operaciones. De hecho, desde el entorno del entrenador heleno, según indicaron fuentes a este periódico, se estaba a la espera de la desvinculación del balcánico.

Lo cierto es que el relevo ha deparado cierta sorpresa. Y es que desde las altas esferas del club lagunero se había transmitido confianza en Markovic, al menos hasta el próximo partido oficial del equipo: la cita de la competición doméstica del próximo sábado 2 de diciembre (20:30 horas, Santiago Martín) frente al Real Betis.

Eso sí, la sintonía no era la mejor y, sobre todo, las sensaciones que daba el equipo, a pesar de tener unos números buenos en la Basketball Champions League y aceptables en la Liga Endesa, distaba de lo deseado.

Markovic abandona el Iberostar Tenerife tras dirigir un total de 14 partidos. El primero de ellos trajo el segundo título internacional de la historia del CB Canarias: la Copa Intercontinental.

El sustituto del bosnio, que firma hasta final del curso, arribará mañana a la Isla y la plantilla -menos algunos internacionales- se pondrá a su orden desde el lunes en el Santiago Martín.

Katsikaris tiene nueve temporadas de experiencia en la Liga ACB. Llegó a la competición en octubre de 2006, cuando cogió el Valencia -tres cursos-. En enero de 2010 se hizo cargo del Bilbao -cuatro campañas-. Recientemente dirigió dos años al UCAM Murcia.

Exseleccionador ruso y griego, Fotis Katsikaris viene de ser destituido, hace unas semanas, en el israelí Hapoel Jerusalem. Ahora coge el mando de unos aurinegros que quieren reencontrarse.