El pasado fin de semana el haltera lagunero Andrés Mata puso un gran colofón a su temporada, la "mejor" de su "carrera", según afirma el propio protagonista a EL DÍA. El deportista de la Escuela Tinerfeña de Halterofilia obtuvo un meritorio quinto puesto en la cita mundialista de Anaheim -California, Estados Unidos-. Un logro jalonado por el récord de España en su categoría -77 kilos-: 344 kilos en el total olímpico -154, en arrancada; y 190, en dos tiempos-.

La consecución de la Copa de España, de la Copa del Rey -con su club-, el haber coqueteado con la presea en el Europeo -fue séptimo tras una penalización y estuvo a punto de lograr la medalla de plata en dos tiempos- y el ser, además, "el mejor atleta masculino del año por puntos" es para estar "muy contento", manifiesta el deportista de élite.

"Me encontré muy bien en la competición, aunque fue bastante dura por la cantidad de competidores en la misma tanda", explica Mata sobre el Mundial. "Me dediqué a hacer mis levantamientos y asegurar una buena posición en total olímpico, que es lo importante. Luego vi que las medallas no estaban tan lejos". ¿Pudo arriesgar por ellas? "Para nada", explica. "Lo que había que arriesgar se arriesgó con el intento con 193 en dos tiempos. Tirar a más hubiese sido jugársela innecesariamente", comenta.

El haltera nacido en Valencia -Venezuela- hace 25 años reconoce su mejoría "a nivel mental. Tengo más confianza a la hora de adaptarme a competiciones complicadas". También "a nivel de técnica", con especial énfasis en "las arrancadas. La evolución y la experiencia de las competiciones anteriores han hecho mucho".

Mata ya mira al 2018 con el propósito de "seguir en la línea y pelear para subir mis marcas". El objetivo es "estén al nivel de las medallas europeas". El certamen continental será en la ciudad otomana de Antalya. Mientras, el Mundial será en Asjabad -Turkmenistán-. Dos citas en las que habrá que contar con el tinerfeño.