¡Qué partido! ¡Y qué victoria! El Iberostar Tenerife dio ayer una lección de juego, de entrega y de fe en el trabajo que han venido haciendo. No fueron egoístas en su juego y sacaron de la pista a un Valencia Basket que llegaba a Gran Canaria como máximo favorito en la eliminatoria. El de ayer fue un triunfo táctico, una victoria bien llevada desde el banquillo y excelentemente ejecutada desde la cancha, con unos jugadores que no escatimaron esfuerzos por alcanzar el objetivo final.

Y se consiguió pese a que hubo unos minutos finales muy complicados con opciones para el equipo de Txus Vidorreta de llevarse la eliminatoria. En las gradas poco apoyo, pero cuando vieron que el Iberostar Tenerife podía llevarse el partido, el público se volcó con el equipo tinerfeño, conscientes del gran desgaste que estaban haciendo. Los de Fotis Katsikaris siguen haciendo historia, siguen mejorando, agrandando sus éxitos. Ahora, con este pase a semifinales de la Copa. Será la primera vez que las jueguen.

Todo un éxito, ya no solo por la temporada que vienen haciendo, sino por el trabajo de los últimos años para conseguir un equipo equilibrado. Podrán pasar crisis deportivas en los próximos meses, pero esto ya no se lo quita nadie.

Pero el partido no empezó bien para los de Katsikaris. Debilidad defensiva y falta de acierto en ataque, que hicieron que el Valencia, con Pleiss muy acertado, se fuera de seis puntos (10-4). Se ajustó la defensa y también se encontró el camino para anotar. Ponitka logró empatar el choque a 12, pero antes un sensacional trabajo ofensivo de Mike Tobey y Vasileiadis, que empezaron a enseñar sus armas.

A partir de aquí, el Iberostar Tenerife fue creciendo en defensa y empezaron a provocar las dudas en el juego de ataque taronja. Sería a un minuto para terminar el primer cuarto cuando llegó la primera ventaja canarista. Fran Vázquez pondría el 16-18 y avisando al rival que podría tener problemas para ganar.

El segundo cuarto mantuvo su excelente nivel y, lo más importante, que con las rotaciones de Katsikaris el juego seguía siendo brillante y el que no aportaba en ataque, como Abromaitis, sí se "pegaba" en defensa en busca de controlar el rebote.

Con 23-26 (14''), Vidorreta tuvo que parar el partido ante el crecimiento ofensivo visitante. El Iberostar Tenerife seguía jugando con mucha tranquilidad, haciendo un juego coral en ataque y aprovechando sus oportunidades. Y es que Katsikaris lo tenía claro y era que tanto Dubljevic como San Emeterio no estuvieran cómodos en la cancha, y así fue.

Al descanso 36-36 y todo un mundo por jugarse. Este tercer cuarto fue determinante en conseguir ese paso adelante para intentar sorprender al rival. Un triple de Vasileiadis, muy activo en todo momento, puso el 44-49 y a continuación robo de balón y canasta de Ponitka (44-51). Máxima ventaja hasta el momento y el pabellón que se empezó a decantar por el equipo canarista.

La opción de Vidorreta fue intentar buscar el acierto exterior ante los problemas que tuvo con los interiores. Green salió a la cancha y anotó dos triples consecutivos (52-53). Era en esos momentos la referencia ofensiva del Valencia Basket. Nuevo ajuste con su defensa y de nuevo el Iberostar Tenerife controlando el juego y el partido.

Y es que si intensos fueron los tres cuartos iniciales, no menos fue el último, aunque con dos equipos muy diferentes en cancha. El grupo tinerfeño estaba crecido, seguía controlando bien el juego de ataque y manteniéndose sólido en defensa. Pero enfrente estaba el Valencia, un equipo de Euroliga que venía de ganar al CSKA de Moscú. Aún así, empezó a ponerse nervioso. Tobey, a cinco minutos del final, había puesto la máxima ventaja (59-67).

Vidorreta sacó a todo su arsenal en busca de dar un giro al partido. Green seguía haciendo daño desde fuera y San Emeterio quiso echarse el equipo a la espalda. Dos fallos de Ponitka bajo canasta pusieron al Valencia tres abajo (70-73), a 43 segundos para el final. White falló un lanzamiento de tres, pero Abromaitis capturó el rebote y anotó los tiros libres (70-75). Un fallo de los valencianos en un saque de banda remató el triunfo para el Iberostar Tenerife.