El alemán Sebastian Vettel (Ferrari) se apuntó la tercera victoria de la temporada ayer en el Gran Premio de Canadá, que le permite recuperar el liderato del Mundial ante un Lewis Hamilton (Mercedes) que solo pudo ser quinto, mientras que Fernando Alonso (McLaren) firmó su segundo abandono seguido y Carlos Sainz (Renault) fue octavo.

Después de ganar las dos primeras carreras del curso, Vettel retomó el sabor de la victoria en "territorio Hamilton", séptima cita del calendario celebrada en el Gilles Villeneuve. El alemán gestionó bien sus opciones saliendo de la pole, sin sorpresas de los Red Bull y su apuesta por los neumáticos más blandos en una accidentada salida por el espectacular choque, sin consecuencias, entre Brendon Hartley (Toro Rosso) y Esteban Ocon (Force India).

La nueva salida lanzada retomó una carrera sin mucha emoción en las posiciones delanteras. Tras la parada, Vettel se quedó con la cabeza hasta el final, respondiendo al ataque con poca fe de Valtteri Bottas (Mercedes) desde la segunda plaza. El podio lo completó Max Verstappen y cuarto fue Daniel Ricciardo.

Por detrás, en la lucha para los españoles, Alonso se marchó de vacío como hiciera hace dos semanas en Mónaco. Los dos abandonos de la temporada vinieron juntos para el doble campeón del mundo, que celebraba su GP 300 pero que tuvo que retirar su monoplaza a 28 vueltas del final cuando rodaba décimo.