Andrés Iniesta anunció que con la eliminación de España del Mundial de Rusia 2018, dice adiós a la selección nacional y "se acaba una etapa maravillosa".

"Es una realidad que hoy es mi último partido con la selección. A nivel individual se acaba una etapa maravillosa. A veces los finales no son como uno sueña, pero las circunstancias lo marcan así", dijo Iniesta. "Me deja un sabor malo y duro. Como a todos. No cambia nada, es un momento difícil que hemos vivido en otras ocasiones. No hemos sido capaces de dar el salto", añadió el hombre que, con su gol en la final de 2010, le dio a la selección española el único título mundial de su historia.

El centrocampista, que fue suplente contra Rusia, dijo que no se sintió señalado por esa circunstancia. "El entrenador es el que toma las decisiones, más allá de que uno las comparta o no. Al final, el entrenador mira por lo que es mejor para el equipo y lo ha entendido así. Es una lástima que no hayamos podido pasar la eliminatoria. Los penaltis siempre es muy cruel", indicó Iniesta que reconoció que vive un "momento difícil", pero que "las críticas o no críticas" que ha sufrido durante el torneo "es lo de menos".

Respecto a quién debe asumir la culpa, dijo que los "principales culpables siempre son los jugadores y que luego cada uno tiene que asumir su responsabilidad". Y, al ser preguntado si influyó la destitución de Julen Lopetegui, señaló: "Sería ventajista de que esa decisión fue fundamental para que hoy estemos fuera. Todo tiene su importancia, pero al final los que teníamos la palabra y la pelota éramos nosotros". Iniesta dijo convencido de que "hay relevo", pero dijo que "lo importante es volver a encontrar el camino del éxito". "Esto es muy complicado, más de lo que parece, pero la selección seguirá para adelante porque jugadores de nivel".

Por su parte, el capitán Sergio Ramos señaló que "el equipo se ha dejado el alma" y que más no se les puede "exigir" a los jugadores sobre los que aseguró sentirse "muy orgulloso. Ha sido durísimo, siempre que te eliminan de un Mundial es muy doloroso. En los minutos finales de la prórroga, Ramos reclamó un posible penalti que el árbitro decidió no pitar. "Me llevaba agarrado y me impide rematar. Ya ha pasado y ya no se puede cambiar nada. El VAR está para ayudar y no creo que lo haya visto y que haya decidido no pitarlo", indicó. "Este equipo tiene una cantera que viene pisando fuerte, jugadores con mucha personalidad. Me gustaría seguir bastantes años porque me voy con una pena terrible. Me voy a ver obligado a llegar a Catar con la barba blanca", declaró.