Las opciones españolas de triunfar en el Rally Dakar 2019 sufrieron un duro golpe este miércoles en la tercera etapa de motos y coches, donde abandonó Joan Barreda (Honda) y Carlos Sainz (Mini) perdió más de tres horas, jornada de más sorpresas entre favoritos y cambios en cabeza, con Pablo Quintanilla (Husqvarna) y Nasser Al-Attiyah (Toyota), al mando.

Entre San Juan de Marcona y Arequipa se esfumaron buena parte de las esperanzas españolas, sobre 467 kilómetros y 331 de especial. La cita 100% peruana y compactada en 10 etapas fue aún más corta de lo que esperaban las bazas de Barrera y Sainz. El castellonense, que marchaba líder, sumó su tercer abandono en cuatro años, después de verse atrapado en una hondonada medida la especial.

Barreda tuvo que ser evacuado en helicóptero, bien físicamente, pero incapaz de sacar su moto de la encerrona del barranco. Además, del español, el dominio de las KTM, campeonas los últimos 17 años en motos, se vio amenazado con largas pérdidas de tiempo de Sam Sunderland, Toby Price y Matthias Walkner, los últimos tres campeones.

La etapa se la quedó el francés Xavier de Soultrait (Yamaha), su primera victoria en el Dakar, solo 15 segundos mejor que Pablo Quintanilla (Husqvarna), nuevo líder. El chileno domina ahora la general con algo más de 11 minutos sobre el argentino Kevin Benavides (Honda). Sunderland se descuelga a 12, mientras que Price (15:17) y Walkner (21:14), vigente campeón, se complican.

El mejor español en motos fue Oriol Mena, octavo, y también es el mejor ahora en la general, duodécimo a 36:03 del líder. En coches, la despedida de Sainz lleva el contrapunto español de su compañero en Mini, Nani Roma, quien terminó quinto este miércoles para manejar una cuarta posición en la general que le mantiene en la pelea.

Sainz no podrá defender su título, con más de tres horas de retraso con la cabeza. El madrileño, doble campeón, rompió la suspensión al caer en un agujero en el kilómetro 38 de la especial, luchando por alcanzar el liderato que tenía a tiro. Después de su conquista el año pasado, Sainz vuelve al camino amargo.

Las dunas y el desierto peruano sacaron la cara dura e imprevisible del Dakar, para un Sainz que volvió a sufrir el destino de averías y accidentes, como en pasados abandonos, siete en los últimos 11 años. Roma, con otro Mini, tiene el liderato a 12 minutos. Un primer puesto con el que se hizo Al-Attiyah.

El catarí luchó por la victoria de etapa con un Stéphane Peterhansel (Mini) que terminó poniendo la directa. El francés ganó su 75º etapa del rally y se puso tercero, a siete minutos, de una general en la que sufrieron favoritos como Sébastien Loeb y Cyril Despres, a 38 y 24 minutos.