La firme decisión de Héctor Hernández de continuar en el Tenerife y cumplir el contrato que firmó el pasado verano, hasta junio de 2019, contrasta con los planes del club de reforzar un puesto que ya cuenta con el lesionado Samuel Camille y el futbolista vallisoletano, que compitió el pasado domingo en el partido ante el Nástic después de tres meses sin sumar ni un minuto en una Liga en la que ha jugado cinco veces.

"Vine con una idea y me mantengo en ella", aclaró ayer el defensa sobre su propósito de permanecer en el equipo. Sin entrar en detalles sobre la información que le han trasladado tanto José Luis Oltra y Víctor Moreno, Héctor recordó que "el fútbol cambia de un día para otro". En su caso, esa variación se produjo tras la lesión de Camille y su entrada en la última alineación, situación que se podría repetir en las próximas jornadas por el tiempo de baja que deberá cumplir el francés. "Es algo que no se veía hace dos semanas", indicó refiriéndose a su nuevo papel en el equipo. "Desgraciadamente, he entrado por la lesión de un compañero", lamentó Hernández, dispuesto a "aprovechar esta oportunidad". Al respecto, Héctor aseguró que se siente "preparado" para competir, ya que nunca ha "bajado los brazos".

Repasando su trayectoria, admitió que la derrota en Mallorca pudo marcar un antes y un después. "Fue un partido malo de todos. A partir de ahí, desaparecí de las alineaciones e incluso de las convocatorias, pero aquí manda el entrenador, y acato sus decisiones", afirmó convencido de que Oltra "no va a tirar piedras contra su tejado" y agradecido por el apoyo que ha recibido de sus compañeros.

Entretanto, Víctor Moreno tiene entre sus planes fichar a un lateral izquierdo en el mercado de invierno, y bajara candidatos como Quintillá (Villarreal B), Robert Mazan (Celta) y Rajko Brezancic (SD Huesca).