Representa la perfecta combinación entre lujo, prestaciones y eficiencia. Así es el Infiniti Q50 Híbrido, una auténtica berlina de tres volúmenes deportiva premium cuyo desarrollo técnico y estético hacen que su conducción se convierta en un auténtico placer.

Con el Q50 Híbrido, la marca japonesa integrada en la alianza Renault Nissan proporciona al conductor y a los pasajeros un confort total envuelto en una atmósfera de lujo y elegancia.

Con 4,8 metros de largo, unas líneas exteriores que combinan elegancia y robustez, la inconfundible parrilla delantera de la marca, las luces LED delante y detrás y su doble salida de escape hacen que el Q50 no pase desapercibido, todo lo contrario.

Su interior destaca por las pantallas (dos) del sistema denominado InTouch situadas en la consola central, la superior de 8 pulgadas y de 7 la inferior y desde donde se controlan la mayor parte de sistemas del vehículo, mientras un intuitivo sistema de comunicaciones integra conexión USB, sistema de manos libres para el teléfono con Bluetooth, aplicaciones de navegación y otras aplicaciones propias de dispositivos móviles.

Cuenta con un cambio automático de 7 velocidades, sistema controlado electrónicamente, e incorpora sensores que reconocen el modo de conducción y lo adaptan al funcionamiento de los cambios.

El sistema de frenada regenerativa permite mantener cargada la batería con solo pisar el freno de forma natural o con las retenciones propias cuando soltamos el acelerador. Entre los sistemas de asistencia a la conducción destaca la dirección directa adaptativa, que trabaja conjuntamente con otros sistemas del coche para hacer que, por ejemplo se mantenga dentro del carril cuando estamos haciendo un cambio involuntario de trayectoria o incluso con fuerte viento lateral, aplicando ligeras correcciones que evitan tener que hacerlo nosotros mismos.

Mecánicamente posee dos motores, uno de gasolina V6 de 3.5 litros que desarrolla 306 CV y un par de 350 Nm, al que se une un eléctrico de 68 CV y 270 Nm de par. En total el conjunto ofrece 364 CV. Ambos trabajan en colaboración y sincronía para reducir los consumos y todo esto se traduce en una aceleración de 0 a 100 km/h en solo 5,1 segundos.

En los semáforos y en las recuperaciones, el par casi instantáneo que ofrece el motor eléctrico se hace notar, ayudando al coche a coger velocidad y alcanzar ritmos de crucero y es que el acelerador parece tener dos tramos, el primero durante el recorrido inicial para manejar el ritmo eléctrico, y luego, al pisar con más fuerza, un segundo en el que se activa el motor de gasolina. En cuanto a precios los mismos parten desde los 36.400 euros, si duda, de los más competitivos del segmento en el que se mueve. Con todo, el Q50 es uno de los grandes pasos previos al desarrollo del primer coche 100% eléctrico de Infiniti y que podría llegar al mercado en 2021.