El presidente del Colegio Oficial de Agentes y Comisionistas de Aduanas de Santa Cruz de Tenerife, Mario Ramos, ayer instó a los municipios de la Isla a través de una carta a que asuman como propia la petición efectuada por este organismo ante el Ministerio de Economía y Hacienda para que el puerto capitalino se dote con un escáner.

En concreto, Ramos anima a las corporaciones locales a llevar al próximo pleno una propuesta para pedir al ministro de Economía y Hacienda, Pedro Solbes, "que cumpla con las previsiones y proceda de forma inmediata a dotar de esta instalación al puerto de Santa Cruz de Tenerife, ya que esta pequeña inversión puede suponer una gran aportación al desarrollo portuario de Tenerife y, por tanto, a una reactivación económica tan necesaria en estos momentos".

La carta destaca que "es de esperar que, por la importancia que tiene para nuestras Islas, el acuerdo sea tomado por unanimidad, para lo que le rogamos contacte con los portavoces de la oposición a los efectos de conseguir su apoyo y consenso". La misiva explica a los ayuntamientos que la realización de inspecciones con métodos no intrusivos "supone hoy día una necesidad para cualquier puerto que desee competir en el ámbito internacional como plataforma logística".

Requisito internacional

Ramos destaca en su comunicación que para formar parte de la iniciativa de EEUU respecto a la seguridad de los contenedores (CSI: Container Security Initiative) resulta "imprescindible" contar con la instalación del método de inspección a través del escáner que solicitan para el puerto tinerfeño.

Además, "consideramos que tal requisito para nuestro puerto está amparado en el denominado Acuerdo entre la Comunidad Europea y EEUU sobre cooperación y asistencia mutua en materia aduanera, en la decisión del consejo del 30 de marzo de 2004, así como en los acuerdos suscritos entre el Reino de España y EEUU en esta materia".

Mario Ramos añade que la instalación de este escáner "tiene una vital importancia con respecto a la inspección de las importaciones e introducciones, y no podemos obviar el ahorro que supone la agilización en los procedimiento de inspectores que, por nuestras especialidades fiscales y configuración geográfica, establecen un especial control sobre todo tipo de mercancías, incluso la de tráfico regional". La carta recuerda que "el puerto tinerfeño ha sufrido durante años una parálisis de su actividad al no disponer de espacio suficiente para abordar los tráficos de tránsito".