Las patronales provinciales de la construcción (Fepeco en Santa Cruz de Tenerife y AECP en Las Palmas) criticaron ayer la actuación de algunas administraciones, que están permitiendo "bajas temerarias" en los concursos públicos de licitación por dar prioridad a aquellas contratas que ofertan precios inferiores a lo presupuestado.

Con ello se pone en riesgo la supervivencia del sector y la propia ejecución de las obras y se menoscaba la prevención de riesgos laborales, aseguró, en declaraciones a EL DÍA, la vicepresidenta de Fepeco, María de los Ángeles Palmero.

En un contexto en el que las contratas que acuden a los concursos públicos aumentan por el bajón de la actividad residencial, indicó que "la Administración tiene que asumir que aquellas que presenten ofertas desproporcionadas deberían retirarse, porque no van a ser capaces de sacar adelante la obra".

Para Palmero, esa "baja temeraria" en los costes del proyecto derivará en que la convocatoria "quede desierta, ya que la obra no se concluirá. Y eso no favorece a la Administración ni a las contratas, que no deben entrar en la dinámica de coger obras por cogerlas".

"Es un error conceder la obra a un contratista que se arriesga a hacer obras con recortes del 30% sobre lo previsto, porque dará lugar a situaciones de economía sumergida, mermando la prevención de riesgos laborales", insistió.

En una línea similar se pronunció, en una rueda de prensa, la presidenta de la AECP, María de la Salud Gil, que criticó que determinadas instituciones "se aprovechen de la crisis" y adjudiquen obras con bajas presupuestarias que alcanzan el 60% del precio de mercado, lo que supone "un fraude" y lleva "al canibalismo".

Palmero explicó que normalmente los precios de los proyectos "casi nunca se corresponden a los del mercado -están por debajo-, algo que se ve a medida que se ejecuta la obra y que los técnicos de la Administración saben".

Gil detalló que tras examinar 200 obras adjudicadas en los últimos dos años en la provincia de Las Palmas, la AECP ha detectado que los precios de las licitaciones están un 8% de media por debajo del de partida. "Además, el 50% de la puntuación se refiere al precio y sólo un 31% a mejoras".

Añadió que estas "bajas encubiertas" pueden llegar al 41% y, sumando todos los parámetros, al 60% del importe de la obra, lo que, en su opinión, provoca "riesgos incontrolados en las empresas que pueden derivar en alargar aún más las dificultades del sector".

Además, consideró que se está poniendo "en peligro" el interés general "por la falta de equilibrio entre precio y calidad", al estimar que "es imposible que las cosas se hagan bien" con las rebajas citadas. Criticó también que "se están concentrando las adjudicaciones y se está expulsando a las pequeñas y medianas empresas (pymes) de la licitación pública, lo que supone una restricción de la competencia".

En cualquier caso, cabe destacar que la vicepresidenta de Fepeco rompió una lanza a favor del Cabildo de Tenerife, que "en sus últimos pliegos de contratación ha castigado esas bajas temerarias y ha premiado los criterios técnicos". A su entender, "ha entrado a valorar cuestiones que son más importantes que el precio".