Más apoyo público y urgencia en la reforma laboral para salvar unos negocios que generan el 70% del empleo en Canarias. Ese es el mensaje que lanzó ayer el presidente de la Asociación de Empresas Familiares de Canarias (EFCA), Antonio Fernández, durante la inauguración de la Jornada "El Genograma de la Empresa Familiar", a la que también asistió la vicepresidenta primera de la Cámara de Comercio de Santa Cruz de Tenerife, María de los Ángeles Palmero.

La empresa familiar reivindica su importancia y su peso en la economía del Archipiélago.

Fernández hizo en la Cámara tinerfeña un llamamiento directo a los poderes públicos del Archipiélago y del Estado para que, según dijo, "dejen de mantener como el gran olvidado un modelo de negocio que en Canarias genera el 70% del empleo privado".

El presidente de la EFCA señaló que "no se puede seguir perdiendo el tiempo con más análisis y sesudos estudios. Ahora lo que toca es actuar, y de hacerlo ya".

En este sentido, tanto Fernández como Palmero coincidieron en calificar de vital la reforma del mercado laboral, "unos cambios que deben adoptarse de manera urgente y que son esenciales para generar un ambiente adecuado para que la semilla de la generación de puestos de trabajo germine y lo haga con estabilidad".

Tal y como indicó el presidente de la EFCA, "en estos momentos estamos padeciendo una auténtica atonía y casi anorexia en la generación de empleo, porque el clima para el desarrollo del espíritu empresarial no es el idóneo".

Según la vicepresidenta de la Cámara es urgente reformar el mercado de trabajo porque "no funciona, es demasiado rígido, genera costes excesivos y no ofrece suficiente cualificación", tras lo que recordó la existencia de problemas como el absentismo o la "mala situación" de los estudios de Formación Profesional.

Palmero recordó que el año pasado se crearon en Canarias 1.000 empresas menos que en 2008, lo que supone una caída de casi el 25%, y cerraron un 42,5% más de negocios que hace dos años. Según indicó, "en esta negra estadística la empresa familiar tiene un desafortunado protagonismo, ya que en Canarias representa el 80% del tejido empresarial, con unos 100.000 negocios".