El Gobierno de Canarias ha pedido hoy al Ejecutivo de José Luis Rodríguez Zapatero que defienda los intereses del sector del plátano canario ya que una reducción de los aranceles que la UE fija para la importación desde países extra comunitarios es una seria amenaza para el sector.

El Gobierno de Canarias lamenta en un comunicado la "grave amenaza" que supone para los productores de plátano del archipiélago la oferta de la UE de un arancel preferencial de 75 euros por tonelada a las importaciones de banana procedentes de Colombia, en el marco de los acuerdos de asociación con este país.

Añade que, de darse esta situación y extenderse este descenso radical del arancel a la entrada de bananas de otros países latinoamericanos, "el cultivo en Canarias se vería seriamente afectado".

Asimismo, y en la línea de lo expresado por la asociación que engloba a los productores europeos (APEB), se apela a la responsabilidad del Gobierno de España, "que debería defender los intereses de este subsector en Canarias, principal productor comunitario de esta fruta, del que dependen 10.300 agricultores, unos veinte mil empleos y el mantenimiento de 9.500 hectáreas de terreno agrario".

El pasado 15 de diciembre la UE y todos los países latinoamericanos exportadores de banana acordaron en Ginebra reducir el arancel a la entrada de banana latinoamericana en territorio comunitario, lo que supone una disminución inicial del arancel -que pasa de 176 euros por tonelada a 148 a partir de la firma del acuerdo-, a la que seguirá una reducción progresiva del mismo hasta situarse en 114 euros el año 2017.

Señala el Gobierno de Canarias que esta situación "de por sí negativa" se puede ver empeorada de confirmarse la noticia dada a conocer ayer por la APEB, en la que se anuncia que la UE ha ofrecido a Colombia en una reunión bilateral una reducción del arancel hasta los 75 euros por tonelada, en el marco de los Acuerdos de Asociación con este país.

En caso de producirse esta situación, puesto que el grueso de la importación de bananas a la UE procede de estos países latinoamericanos, este nuevo arancel de 75 euros "dejaría sin efecto en términos prácticos la reducción progresiva pactada hasta 2017 en el marco de los acuerdos multilaterales de Ginebra".

Esta situación supone una pérdida de competitividad para el sector canario, "como ha quedado demostrado con la caída inmediata de los precios durante los meses de enero y febrero de este año".

Durante las primeras cinco semanas del año, según datos del Ministerio de Economía y Hacienda, se ha observado una reducción cercana al 40% respecto a idéntico periodo del año 2009, lo que ha obligado al sector a retirar fruta del mercado para evitar un desplome mayor.

Se observa, además, una importante pérdida de cuota de mercado del plátano canario respecto a la banana ya que, si en 2003 el plátano tenía un 93% del mercado peninsular, en la actualidad representa un 73%, lo que implica una pérdida de veinte puntos a favor de la banana, "que se verá incluso incrementada con la entrada en vigor del nuevo arancel".