La dirección del PSOE asume como suya la reforma laboral diseñada por el Gobierno y está abierta a que se tramite como proyecto de ley y no como decreto-ley, según ha dicho hoy la secretaria de Organización del partido, Leire Pajín, que ha calificado la propuesta como de calado, profunda y equilibrada.

Pajín se ha expresado en estos términos en una rueda de prensa posterior a la reunión de la Ejecutiva Federal del PSOE, que ha presidido en Ferraz el secretario general de los socialistas y jefe del Ejecutivo, José Luis Rodríguez Zapatero.

Durante este encuentro, según ha asegurado Pajín, la dirección federal de los socialistas ha calificado como "tremendamente positiva" la propuesta del Gobierno, al estimar que será "una de las más profundas" de todas las llevadas a cabo hasta ahora y, al mismo tiempo, sensata y equilibrada con los momentos actuales.

El Gobierno dará luz verde al decreto-ley el próximo miércoles tras "agotar hasta el último minuto" el diálogo social y el texto se someterá posiblemente a la convalidación del Congreso el día 22, aunque podría acordarse su tramitación como proyecto de ley, algo a lo que el PSOE en principio no se opone, pese a que eso retrasaría hasta el próximo periodo de sesiones la aprobación de la reforma.

Ha recordado Pajín, en este contexto, que sólo la reforma laboral del Gobierno de José María Aznar en el año 2002 se aprobó por decreto-ley.

Los socialistas consideran que la propuesta del Gobierno recoge numerosas medidas que patronal y sindicatos han ido poniendo sobre la mesa en los últimos tiempos y confían en obtener el máximo consenso de los grupos parlamentarios.

Se han comprometido, en este sentido, a "trabajar sin descanso" para obtener la mayoría parlamentaria necesaria.

"No tenga ninguna duda de que la reforma es absolutamente defendible y así lo vamos a hacer todos los socialistas", ha aseverado Pajín al ser preguntada sobre el abaratamiento del despido que se recoge en la propuesta del Ejecutivo.

Un abaratamiento que, ha juzgado, no recae sobre los derechos de los trabajadores.

"Hemos agotado hasta el último minuto con todo nuestro esfuerzo y con todo nuestro empeño en el diálogo social" y "ahora ha empezado el tiempo de la verdad", en el que el Gobierno va a asumir su responsabilidad, porque no hay espacio "para medias tintas, ni para parches", ha incidido Pajín, convencida de que "ahora es el momento para una reforma de calado y para mucho tiempo".

Incrementar la estabilidad en la contratación y atajar la temporalidad que caracteriza al empleo en España, así como incentivar la creación de puestos de trabajo, son los objetivos que, a su juicio, marcan esta reforma laboral.

También ha aprovechado para aconsejar al líder del PP, Mariano Rajoy, "si tiene un minuto", que "se detenga a pensar en España" y evalúe en qué "ha contribuido él a sacar al país de la crisis económica o a generar más empleo".

"Desgraciadamente, el resultado de este análisis es, cuanto menos, exiguo", se ha lamentado.

Tras pedir a Rajoy que arrime el hombro a partir de ahora y apoye la propuesta sobre el mercado laboral, la "número tres" del PSOE ha recordado al líder del PP y al portavoz de CiU en el Congreso, Josep Antonio Duran Lleida, que llevan meses criticando la tardanza del Gobierno en realizar la reforma.

Ahora disponen de una propuesta detallada, articulada y por escrito, sobre la cual Pajín les ha instado a pronunciarse e incluso a dar a conocer sus alternativas en el caso de que no la compartan.

Y es que, desde su punto de vista, no se puede criticar sin alternativas ni confrontar sin propuestas.

Refiriéndose expresamente al PP, ha dicho que su comportamiento produce "sonrojo".

Pese a la posible convocatoria de una huelga general por parte de los sindicatos, Pajín ha ratificado la confianza del PSOE en el diálogo social y ha negado que la propuesta del Gobierno sea un calco de la de los empresarios.

Incluso ha bromeado al señalar: "La patronal hubiera aplaudido con las orejas esta reforma" si fuera la suya.