El portavoz de la Unión Sindical de Controladores Aéreos (USCA), César Cabo, pidió ayer la intervención del ministro de Fomento, José Blanco, en las negociaciones del segundo convenio colectivo de la profesión porque "está en entredicho su palabra".

Para el secretario de comunicación de USCA, tras la ruptura de la mesa de negociación del convenio colectivo "existen dos posibilidades": o Aena incumple de forma particular el compromiso que les hizo el ministro en la reunión de septiembre, o bien Blanco "está al tanto del incumplimiento".

En caso de que se diera el segundo supuesto, Cabo afirmó que sería una demostración de que la "palabra de Blanco no vale", y por ello le pidió que "se pronuncie al respecto", o incluso celebre una nueva reunión "cuando quiera en el Ministerio".

Los representantes de los controladores anunciaron el jueves que no se sentarán en la mesa de negociación del segundo convenio colectivo hasta que no se contrate a los 47 alumnos que han superado los cursos de Senasa en julio.

Cabo reconoció que esta demanda no estaba en el acuerdo firmado el 13 de agosto con Aena, que puso fin al conflicto mantenido durante meses, pero sí recordó que el anterior presidente del gestor aeroportuario dijo en 2006 que cuando la vigésimo novena promoción saliese de Senasa serían contratados inmediatamente.

Para el portavoz, es "inconcebible" la falta de respeto con que han sido tratados estos trabajadores, ya que a muchos de ellos se les dijo, cuando estaban ya rumbo a sus destinos, que regresasen a sus casas porque no iban a ser contratados.

Por otro lado, USCA garantizó ayer la "total normalidad" de los servicios aéreos durante el Puente del Pilar y desmintió "rotundamente" una huelga encubierta.