La multinacional farmacéutica Sanofi-Aventis, que cuenta con dos centros de producción en Alcorcón (Madrid) y Riells i Viabrea (Girona), estudia un posible ajuste de empleo en España que podría llegar a afectar a más de 200 de sus 900 trabajadores, según publica hoy La Vanguardia.

Esta medida podría ser anunciada hoy mismo durante la reunión a la que la dirección ha convocado en Barcelona a los representantes del comité de empresa intercentros y en la que tienen previsto comunicar los últimos datos económicos de la empresa, según han confirmado fuentes sindicales.

La crisis económica y las medidas de ajuste del déficit público, que han supuesto la reducción del precio de los medicamentos por parte de las administraciones, han abocado al sector farmacéutico a un proceso de reconversión.

De hecho, hace poco menos de un año que la vicepresidenta para Europa y Canadá de Sanofi-Aventis, Belén Garijo, advirtió durante unas jornadas en Barcelona de que el sector había sufrido en los últimos cinco años "una transformación sin precedentes", marcado por una caída del mercado en los países desarrollados, no compensada por el crecimiento de los países emergentes.

El ajuste que estudia la compañía se sumaría al que ya realizó a finales de 2008, que afectó a 156 trabajadores, en especial a los integrados en la red de ventas.

Este Expediente de Regulación de Empleo siguió a otro pactado pocos meses antes y en el que se rescindieron 135 contratos.

La compañía justificó los despidos por motivos organizativos y productivos.

Sanofi-Aventis, cuya sede en España está en Barcelona, es uno de los líderes mundiales de la industria farmacéutica y el primero de Europa. La compañía está presente en más de cien países, tiene 82 plantas industriales y cerca de 100.000 empleados en todo el mundo.