La bolsa española ganó hoy el 0,5 por ciento, animada por el alza de las plazas europeas, el buen comportamiento del sector energético y Telefónica y el descenso de las peticiones de subsidios de desempleo en los Estados Unidos.

Así, el índice de referencia del mercado español, el IBEX 35, subió 53,4 puntos, el 0,5 por ciento, hasta 10.753,50 puntos, por lo que sus perdidas en lo que va de año se sitúan en el 9,94 por ciento.

En Europa, con el euro a 1,393 dólares, subieron las principales plazas europeas: Milán, el 1,22 por ciento; el índice Euro Stoxx 50, el 0,57 por ciento; Londres, el 0,56 por ciento; París, el 0,5 por ciento, y Fráncfort, el 0,42 por ciento.

Con la ayuda de las plazas europeas, la bolsa española empezó el día con pequeñas ganancias a pesar de la caída del 0,4 por ciento de Wall Street el día anterior y de los resultados del Banco Santander.

La entidad cántabra redujo su beneficio cerca del 10 por ciento en los nueve primeros meses del año, en los que ganó 6.740 millones, y anunció que no cumpliría sus previsiones de resultados para este ejercicio, lo que afectó a su cotización y a la marcha del mercado nacional, que incurría en pérdidas, también afectado por el retroceso de BBVA.

Con la mejora de la confianza de los consumidores europeos, el descenso del paro en Alemania este mes y la paulatina recuperación del euro, que empezaba la sesión bursátil en 1,385 dólares y acababa en 1,393 dólares, la bolsa se fue recuperando.

El mercado pasaba por alto la caída del 0,7 por ciento del precio de la vivienda en el Reino Unido en octubre y empezaba a prestar atención a los resultados empresariales que se publicaban en los Estados Unidos.

Algunas cuentas societarias, como las de Kodak o Motorola, así como el descenso de las peticiones semanales de subsidios de desempleo estadounidenses, de 455.000 a 434.000, animaban a Wall Street, que abría con ganancias.

De esta manera, con el euro y el petróleo al alza -al final del día el barril de Brent se cambiaba a cerca de 84 dólares-, la bolsa española conseguía ganancias, sustentadas en gran parte por las compañías eléctricas, petroleras y Telefónica, aunque se alejaba del nivel de 10.800 puntos al cierre.

Entre los grandes valores subieron Repsol, el 1,78 por ciento; Telefónica, el 1,67 por ciento, e Iberdrola, el 0,72 por ciento. Los grandes bancos bajaron: BBVA, el 0,55 por ciento, y Banco Santander, el 0,36 por ciento.

La mayor subida del IBEX correspondió a Mapfre, el 2,71 por ciento, seguida de Ebro Foods, con una revalorización del 2,17 por ciento, y de Repsol y Telefónica.

Las siderúrgicas Acerinox, con un descenso del 2,43 por ciento, y ArcelorMittal, que cayó el 1,06 por ciento, lideraron las pérdidas del IBEX, en tanto que Bankinter bajó el 1,03 por ciento, y OHL, el 1,01 por ciento.

En el mercado continuo, la mayor subida recayó en Sniace, el 12,82 por ciento, mientras que Sos Corporación liquidó un tercio de la subida de la víspera y lideró las pérdidas con una bajada del 13,95 por ciento.

Poco antes del cierre del mercado de deuda la rentabilidad del bono español a diez años subía una centésima y se situaba en el 4,17 por ciento, mientras que el efectivo negociado en bolsa se situó en 5.742 millones, de los que cerca de 3.150 millones -2.500 millones fueron en títulos de Telefónica- los intermediaron inversores institucionales.