El vicepresidente primero del Gobierno y ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, aseguró este viernes que el Gobierno y los ciudadanos "han tomado nota" del "desparpajo notable" con el que se pasean los controladores aéreos, como si aquí "no hubiera pasado nada", para "defender sus privilegios", tratar de minimizar los efectos de lo ocurrido e incluso exigir que se compartan responsabilidades.
En rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, Rubalcaba afirmó que las explicaciones de los portavoces de USCA causan "cierta perplejidad" y consideró que "no son conscientes" de que han hecho "algo gravísimo", que no se trata ya de una "huelga salvaje", sino que "unos señores que abandonaron su puesto de trabajo y que forzaron el cierre del espacio aéreo".
"Gobierno y ciudadanos tomamos nota de este desparpajo y esta falta de responsabilidad que siguen manifestando, con el intento de que compartamos la responsabilidad cuando es sólo de ellos y es gravísima", afirmó.
Rubalcaba aclaró que el decreto aprobado el pasado viernes recoge una reglamentación más exhaustiva sobre las bajas del colectivo para que éstas puedan surtir efecto, ya que prevé la presencia de médicos de AENA que las ratifiquen, bajo comprobante médico, más allá de la autodeclaración de que un controlador de que no están en condiciones para desempeñar su labor.
CASI 500 EXPEDIENTES ABIERTOS POR AENA
Por otro lado, ha señalado que existen ya cerca de 300 demandas presentadas por los afectados por el caos aéreo contra los controladores en juzgados de toda España para pedir responsabilidades penales, laborales y civiles.
"Esto conforma un puzzle complejo de exigencia de responsabilidades que va a seguir sus pasos", explicó el vicepresidente primero del Gobierno, quien añadió que "estas cosas no van acabar sin nada" y que "el peso de la ley va a caer lógicamente sobre aquellos que cometieron esa gravísima irresponsabilidad".
En este sentido, Rubalcaba ha recordado que AENA ha abierto ya la vía laboral con la apertura de casi 500 expedientes a los controladores que abandonaron sus puestos de trabajo en las torres de control y en las oficinas.
Además, el ministro del Interior ha aludido también a la investigación abierta por la Fiscalía General del Estado contra los controladores, así como las diligencias que están llevando a cabo las fiscalías de los distintos Tribunales Superiores de Justicia provinciales.