El Juzgado de lo Mercantil número 5 de Madrid ha aceptado el Expediente de Regulación de Empleo (ERE) presentado por Coronel Tapiocca que contempla 119 despidos de los cerca de 300 trabajadores y el cierre de 21 las 64 tiendas que tiene la compañía, según el auto dictado el pasado 17 de enero, al que tuvo acceso Europa Press.

El juez valida así el acuerdo alcanzado por la administración concursal y la representación de los trabajadores que establece una indemnización de 23 días de salario por año trabajado con un máximo de 12 mensualidades, fijando la fecha de extinción a 30 de noviembre de 2010.

Estas indemnizaciones se convierten así en créditos contra la masa dentro del concurso de acreedores voluntario en el que está inmersa la empresa textil. En el auto, el juez ordena su comunicación al Fondo de Garantía Salarial (Fogasa) que será el encargado de pagar las indemnizaciones, ya que la empresa carece de liquidez para abonarlas.

Según fuentes jurídicas consultadas por Europa Press, los trabajadores despedidos accederán de forma inmediata a las prestaciones por desempleo, pero no cobrarán las indemnizaciones del Fogasa hasta dentro de seis u ocho meses.

Este ERE supone el cese de una veintena de empleados del almacén y las oficinas centrales, y el resto afecta a los trabajadores de los establecimientos ubicados en la Comunidad de Madrid, Cataluña, Galicia, Comunidad Valenciana, Castilla-La Mancha, Murcia, Canarias y Andalucía.

Tras esta reducción del tamaño de la empresa, la actividad de Coronel Tapiocca prosigue su actividad con normalidad y ya se ha adquirido la colección textil de verano, según las mismas fuentes.

Por otra parte, el proceso concursal continúa y los responsables de la compañía tienen un plazo de cerca de dos meses para estudiar si presentan una propuesta de convenio de acreedores o para buscar un comprador, según explicaron a Europa Press en fuentes jurídicas.

La compañía todavía podría acabar en liquidación si no consigue hacer frente a sus deudas o sacar adelante el convenio. La cadena de tiendas de moda y complementos, propiedad del fondo Gala Capital, fue declarada en concurso de acreedores a finales del pasado septiembre después de fracasar las negociaciones con las entidades financieras y los proveedores para la refinanciación de una deuda de 54,2 millones de euros.

Desde 2008 Coronel Tapioca había acometido una reestructuración de su red comercial, con el cierre de una treintena de tiendas y la aplicación de un ERE para el 14% del personal.

Los costes de la reestructuración, las pérdidas por liquidación de ''stock'' de años anteriores y el impacto de la crisis en el sector propiciaron que la compañía cerrase su último ejercicio fiscal, entre febrero de 2009 y enero de 2010, con unas pérdidas de 13,5 millones de euros y un descenso de la facturación cercano al 25%, hasta 27,4 millones de euros.

Entre sus acreedores figuran el banco EBN y las entidades Caja de Ahorros del Mediterráneo (CAM), Caja Castilla-La Mancha (CCM), Bancaja y Caja de Cantabria.