El director general de Hotasa, Carlos Miranda, lanzó ayer un mensaje de tranquilidad al personal de sus cinco establecimientos hoteleros en el Archipiélago, a los que garantizó la estabilidad de sus puestos de trabajo, a pesar de que el pasado jueves esta compañía, junto con otras nueve enseñas del grupo Nueva Rumasa, se acogieran a un procedimiento especial de la Ley Concursal.

Miranda recalcó que "dentro de la complejidad que entraña una circunstancia como ésta, nuestra intención es seguir trabajando, día a día, con total normalidad". En esta línea, subrayó que "seguiremos garantizando como siempre los puestos de trabajo y, en un principio, no tenemos por qué hacer ninguna variación con lo que hemos venido haciendo en los últimos meses".

El máximo representante nacional de la división hotelera del conglomerado de empresas en manos de la familia Ruiz Mateos precisó, a preguntas de este periódico, que, en estos momentos la cadena gestiona cuatro complejos alojativos en Tenerife y uno más en Gran Canaria, con unas 1.500 habitaciones en total y una plantilla media anual que ronda los 430 trabajadores.

Se trata del Bonanza y Canarife Palace, ambos de cuatro estrellas, que, según explicó Miranda, "se explotan de manera conjunta bajo el nombre comercial de Hotasa Puerto Resort", en el Puerto de la Cruz. Al respecto, puntualizó que "por motivos de eficiencia en los costes se opera con una sola recepción, una cocina y un único comedor". No obstante, destacó que en temporada alta, como ahora, se ponen en marcha los dos comedores".

También en la ciudad portuense, y con la misma categoría que los anteriores, Hotasa controla el Interpalace, además del Semiramis, de cinco estrellas, que es el "buque insignia" de la cadena en las Islas. A estos tres se le suma el Lagos de César, en Los Gigantes, el más pequeño de sus establecimientos en Tenerife. Entre tanto, en Gran Canaria cuenta con el Beverly Park, en Playa del Inglés.

Teniendo en cuenta este amplio entramado, el director general de Hotasa incidió en el interés por "sacar el asunto adelante".

De hecho, enfatizó que "estamos convencidos de que vamos a asegurar la viabilidad de la empresa, conservar el empleo y mantener la operativa habitual, por lo que no se producirá ninguna diferencia en el servicio a nuestros clientes".

A su vez, arguyó que "desde principios de año estamos registrando unas ocupaciones que casi llegan al 100% y las previsiones hasta final de Semana Santa son muy buenas", un hecho que, a su modo de ver, sirve de aval para afrontar la situación.

Por otro lado, hizo hincapié en la "apuesta" por el sector hotelero en Canarias, donde "hemos llevado a cabo inversiones muy importantes para reformar unos establecimientos que estaban muy mal conservados, con actuaciones tanto a nivel de mobiliario como en las instalaciones".

Mientras, el inicio del proceso, que podría derivar en suspensión de pagos, ha generado una "lógica inquietud" entre el casi medio millar de trabajadores de la compañía, según comentó ayer el secretario de Acción Sindical de la Federación de Comercio, Hostelería y Turismo (Fecoht) de Comisiones Obreras en Tenerife, Carmelo Olivero, aunque apostilló que "nos tranquiliza el hecho de que Hotasa esté al día en el pago de las nóminas y, a pesar de que, puntualmente ha habido algún retraso en el cobro, ha cumplido con todos los compromisos contractuales con sus empleados".

Tanto él como el secretario de coordinación estatal de las secciones estatales de Fecoht, Manuel Fitas, agregaron que la única queja del colectivo es que se haya enterado por la prensa de la intención de Nueva Rumasa. Por ello, aunque ayer mismo recibieron un comunicado de la dirección del grupo en el que se les trasmitía "una situación de tranquilidad", han solicitado una reunión con la dirección para que les informe con detalle de los entresijos del proceso concursal y su posible incidencia en los trabajadores, que tendrá lugar la próxima semana.

Igualmente, Fitas argumentó que esta maniobra podría responder a una estrategia de la empresa para negociar en condiciones más ventajosas con los acreedores".

El vicepresidente de la patronal hotelera tinerfeña, Ashotel, Juan Antonio Rosado, declaró que "a cualquier empresa del sector le vaya mal no es una buena noticia", pero aclaró que, "aún no se sabe lo que va a ocurrir", en el peor de los casos no implicaría "ningún riesgo de contagio para el destino". En sintonía con él, el consejero insular de Turismo, José Manuel Bermúdez, mantuvo que "habrá que esperar" y que lo principal es que no se pierdan trabajos".

firmas ALIMENTACIón

Incertidumbre por los impagos

Los empleados de la división de alimentación son los que se han mostrado más preocupados. El personal de Carcesa, Clesa, Royne y Quesería Menorquina acumula retrasos de hasta tres meses en sus nóminas. Entre tanto, los ganaderos de Ávila y Toledo han decidido emprender acciones judiciales contra la compañía, mientras el 70% de los productores de leche de Aragón están afectados por los impagos de Cacaolat.

CONSUMIDORES

Desprotección y poca formación

La Confederación Española de Organizaciones de Amas de Casa, Consumidores y Usuarios (Ceaccu), incidió en "la desprotección" y la "deficiente" formación financiera que tienen los pequeños ahorradores. Y apuntó que el 90% de los ahorradores no contrasta la información de las empresas con la de la CNMV.

GOBIERNO

Siete avisos a los inversores

La vicepresidenta segunda y ministra de Economía y Hacienda, Elena Salgado, señaló ayer que el Gobierno cambió la legislación para que las emisiones de pagarés como la que hizo Nueva Rumasa "tuvieran que ser realizadas a través de un intermediario financiero" y que la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) dio "hasta siete avisos" en los que recomendaba a los inversores "informarse bien de las características de la emisión y de los riesgos asociados" a los pagarés de este conglomerado empresarial que ayer inició el procedimiento especial de la Ley Concursal para sus diez principales enseñas (Clesa, Garvey, Hotasa, Dhul, Elgorriaga, Ibramer, Trapa, Carcesa, Quesería Menorquina y el equipo de fútbol del Rayo Vallecano).

PARTIDO POPULAR

Más atención de las autoridades

La secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, resaltó que las operaciones del grupo Nueva Rumasa debieron merecer una "atención especial" por parte de las autoridades y confió en que las empresas puedan llegar a acuerdos con los acreedores y los 5.000 inversores puedan cobrar. Por el momento, dos de ellos ya se han dirigido a la CMNV para solicitar información sobre el cobro.