El presidente del Banco Central Europeo (BCE), Jean-Claude Trichet, afirmó hoy que "un dólar sólido y creíble" es bueno para la economía internacional, al tiempo que preconizó una mayor flexibilidad en los tipos de cambio.

"Un dólar sólido y creíble sería positivo para Estados Unidos y para la comunidad internacional", aseguró Trichet en París, donde participó en un coloquio sobre bancos centrales.

El presidente del BCE apostó por la "independencia" de los bancos centrales y también del Fondo Monetario Internacional (FMI) como organismo que debe vigilar la situación financiera internacional.

"Hay instituciones que no deben estar bajo ninguna autoridad política, como los bancos centrales o las entidades de control. Durante la crisis asiática ya vimos el peligro de que estas entidades estén bajo el mando de las autoridades políticas", afirmó.

Trichet aseguró también que "una evolución hacia unos tipos de cambio más flexibles y una apreciación ordenada de las divisas" también sería positivo para la economía internacional, "incluida la de los países emergentes".

Pero advirtió del riesgo de una excesiva volatilidad de los tipos de cambio, que puede ser peligrosa para la estabilidad económica y financiera del mundo.

El presidente del BCE no se refirió a sus declaraciones de la víspera en la que dejó abierta la puerta a una próxima subida de los tipos en la zona euro.