El programa extraordinario de incentivos a la contratación laboral que puso en marcha el Gobierno autónomo en abril de 2010 se saldó al final del ejercicio con 1.545 contrataciones, de acuerdo con los últimos datos publicados por el Ejecutivo en el Boletín Oficial de Canarias (BOC).

La progresión de estas ayudas, que consisten en que el Gobierno se hace cargo del pago de las cotizaciones sociales que deben abonar los empresarios por sus nuevos empleados, ha sido evidente desde que se pusieron en marcha: 230 contratos generados en sus dos primeros meses de vigencia, 417 entre junio y agosto y 898 de septiembre a noviembre.

Hay que precisar, no obstante, que los convenios correspondientes a ese último periodo figuran en una resolución provisional del Servicio Canario de Empleo. Las empresas "subvencionables" tienen aún unos días para confirmar que aceptan la ayuda, y buena parte de ellas aún debe subsanar errores en su solicitud.

La cifra de 898 contratos publicada en el BOC el pasado 1 de abril no es definitiva, por tanto, pero implica que el principal programa para estimular el empleo privado se acerca al ritmo esperado por el Ejecutivo isleño.

El Gobierno ha lanzado, sobre todo a raíz de la incipiente recuperación del sector turístico, reiterados mensajes a los empresarios para que éstos echen mano de los incentivos laborales que ha puesto a su disposición y contribuyan así a reducir el desempleo.

Desde el punto de vista de los aludidos se recalca que "si no hay actividad económica no se genera empleo, con o sin incentivos". Así lo señala el secretario general de la patronal provincial CEOE-Tenerife, Pedro Alfonso, que reconoce que los resultados del programa "no son los esperados", aunque explica que se han generado "muchas más contrataciones" al margen del mismo.

Y ello se debe, argumenta, a que para acceder a las ayudas hay requisitos que muchas veces no pueden cumplir las empresas o a que, simplemente, el programa no se ajusta a sus necesidades.

Cabe recordar que el pago de las cuotas sociales se produce cuando el trabajador contratado ha completado ya seis meses en la empresa, que, además, no puede haberse desprendido de más del 10% de su plantilla antes de recurrir a los incentivos.

De todas formas, la positiva evolución de la respuesta empresarial a esas ayudas deja entrever un incremento en el número de contratos generados, indica el secretario general de la CEOE-Tenerife, que atribuye tal previsión al mayor conocimiento de los empresarios sobre el programa y a la "tímida" recuperación económica.

"Poco a poco se trasladará a la creación de empleo, aunque con cierta prudencia. Las empresas -añade- deben recuperarse de las pérdidas sufridas en estos últimos años y de los créditos suscritos, y además necesitan un tiempo de estabilidad y crecimiento de la actividad que genere confianza".

Tras reservar una partida de 30 millones de euros en 2010 a su plan de incentivos, el Gobierno, ante la floja respuesta privada, ha rebajado su presupuesto a 7,8 millones en 2011.

El sindicato CCOO-Canarias reclama mayor vigilancia sobre el número de horas contratadas por los empresarios que reciben ayuda.