Más de 2,21 millones de personas que se quedaron en paro durante 2010, el 51,8% del total, estaban trabajando y perdieron su empleo porque su contrato finalizó o no se renovó, según los nuevos datos de la Encuesta de Población Activa (EPA) que publicó ayer el Instituto Nacional de Estadística (INE).

Esos datos son las variables de submuestra de la EPA del año pasado, que no incluyen un desglose autonómico. De acuerdo con ellos, 1,1 millones de los parados que habían trabajado anteriormente llegaron al desempleo por despidos o por la supresión de su puesto de trabajo, incluida la regulación de empleo.

Es decir, el despido o la supresión del puesto afectó al 25,7% de los parados, según la EPA.

Además, en 2010 hubo 493.100 parados que dejaron su empleo hacía tres años o más (el 11,5% del total) lo que supone 2,5 puntos más que en 2009.

Atendiendo a la formación, las tasas de paro más altas en 2010 se dieron entre las personas instruidas en programas de formación básica y desarrollo personal (24,7%), mientras que las más bajas fueron para las formadas en educación (7,9%) y en salud y servicios sociales (10%).

Por contra, las tasas de actividad más altas (superiores al 82%) fueron para los trabajadores formados en ciencias, mecánica y electrónica, industria manufacturera, construcción y agricultura, salud y servicios sociales.

El año pasado hubo 361.800 personas que trabajaron a tiempo parcial para disponer de más tiempo para cuidar de personas dependientes, lo que supone un descenso del 3,3% respecto a 2009.

Prácticamente todas esas personas fueron mujeres, y el 59,7% de ellas cree que no hay servicios adecuados para la atención a dependientes o no pueden costearlos.

Respecto a la contratación, el 3% de los contratados en 2010 fue a través de una empresa de trabajo temporal (ETT), porcentaje que se mantuvo respecto a 2009, mientras que el 2,4% fue a través de una oficina pública de empleo, cuatro décimas menos que el año anterior.

Según la EPA, el 11,6% de los ocupados trabajó en jornada nocturna; de ellos, el 13,5% fueron hombres y el 9,5% mujeres.