Los sindicatos y la patronal rompieron ayer su proceso de conversaciones para reformar la negociación colectiva tras cuatro meses de discusiones. En las ruedas de prensa que ofrecieron -por separado- después de la reunión en la que formalizaron esa ruptura, ambas partes se acusaron de falta de valentía para firmar el acuerdo.

CCOO y UGT afrontaron tal encuentro con la esperanza de que la CEOE les remitiera una nueva propuesta de reforma, ya que consideraron "inasumible" el último documento de la patronal.

En su intervención ante los medios informativos, el titular de la CEOE, Joan Rosell, negó un cambio de postura de la confederación tras las elecciones autonómicas y municipales, y reclamó a los sindicatos "más valentía" para encarar futuras negociaciones, al considerar que han sido "demasiado prudentes" en sus planteamientos sobre los convenios.

Rosell, que dijo que las elecciones del 22-M "no han entorpecido ni a favor ni en contra las conversaciones", indicó que dado el "esfuerzo importante" hecho por las partes, ahora "el Gobierno lo tiene fácil" para legislar.

Añadió que la patronal quería dar un "paso atrevido" en la negociación colectiva", pero llegó a la conclusión de que "no era posible seguir y que era mejor dejarlo como estaba".

Asimismo, recalcó que "no es el punto final" de las conversaciones con los sindicatos y avanzó algunas pautas sobre su postura para con la revisión de los contratos.

En su opinión, es preciso simplificar los tipos de contrato porque los empresarios "tienen pánico" a contratar y "problemas" para despedir.

Rosell estuvo flanqueado por el secretario general de la CEOE, José María Lacasa, y el presidente de Cepyme, Jesús Terciado, durante su rueda de prensa.

"Temor escénico"

En la de los sindicatos, que empezó una hora después, a las 18:00 (hora canaria), el secretario general de UGT, Cándido Méndez, culpó a Rosell de la ruptura de las negociaciones por la "presión medioambiental" a la que ha sido sometido y por "cierto temor escénico".

"Mi convencimiento es que no se ha podido alcanzar un acuerdo porque la presidencia de la CEOE no se ha atrevido a dar el paso para llegar a un acuerdo con las organizaciones sindicales", señaló Méndez, al que acompañó su homólogo de CCOO, Ignacio Fernández Toxo.

Méndez situó la quiebra de las negociaciones en el pasado lunes, cuando la patronal presentó una propuesta que hacía correr "hacia atrás las agujas del reloj y las fechas de calendario, sepultando la negociación en el punto de partida de hace algunos meses".

El máximo dirigente de UGT aseguró que el pasado jueves se había acordado proceder a la redacción de la propuesta, pero que el lunes CEOE presentó un documento que supone la "clave material" de la ruptura de las negociaciones bipartitas.

Por su parte, fuentes gubernamentales admitieron que el Ejecutivo "no está contento" por la ruptura de las negociaciones entre sindicatos y patronal, ya que las reformas son mucho más "eficaces y eficientes" si se hacen con consenso.

Además, recordaron que el Gobierno tiene capacidad para legislar, por lo que llevará su proyecto de ley al Consejo de Ministros del viernes 10 de junio. En él tratará de reflejar las posturas en las que más se han acercado los agentes económicos y sociales durante las negociaciones.

Al respecto, Cándido Méndez confió en que el proyecto no contribuya a romper el equilibrio de la negociación colectiva.