El Fondo Monetario Internacional (FMI) ha mantenido sin cambios su previsión de déficit para España en 2011 en el 6,2%, aunque ha mejorado en seis décimas su estimación para 2012, hasta el 5,1%, respecto a la edición de abril de su informe ''Fiscal Monitor'', debido a las últimas medidas anunciadas por el Gobierno para intentar controlar el gasto.

Pese a esta mejora de las previsiones, la institución vuelve a mostrarse más pesimista que el Gobierno español, que espera que el déficit cierre este año en el 6% y descienda en 2012 hasta el 4,4%, con el fin de que en 2013 alcance el objetivo del 3% marcado en el Pacto de Estabilidad y Crecimiento Europeo.

Por el contrario, el FMI empeora su previsión de deuda respecto al Producto Interior Bruto (PIB), que ascenderá hasta el 67,5% este año, 3,5 puntos porcentuales más que en la anterior estimación, y hasta el 69,7% en 2012, 2,6 puntos porcentuales más de lo previsto en abril.

En este sentido, explica que, al igual que ha ocurrido con Alemania, ha revisado de forma significativa la previsión del ratio de deuda respecto al PIB debido al impacto que tendrá en la deuda pública el apoyo al sector financiero, en el caso español concretamente por las emisiones de deuda del Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) y del sistema eléctrico.

RITMO APROPIADO DE CONSOLIDACIÓN.

En términos globales, el Fondo señala que la consolidación se está produciendo a un ritmo "apropiado" en la mayoría de las economías avanzadas, especialmente en la mayor parte de Europa y en Canadá, apoyada por una recuperación de la actividad y los ingresos.

En el caso concreto de Grecia, Irlanda y Portugal, afirma que al aumento de la percepción de riesgo en estos países subraya la necesidad de que implementen sus programas de ajuste y de que se desarrolle un enfoque global y coherente sobre la gestión de crisis en la eurozona.

"En Italia y en España las proyecciones de gasto han sido revisadas a la baja, en vista de las ejecuciones y el anuncio de medidas de control del gasto más detalladas, respectivamente", señala.

Respecto a la eurozona, para la que ha mejorado su previsión de déficit en dos y tres décimas para 2011 (-4,3%) y 2012 (3,4%), respectivamente, incide en que, ante las evidencias de que la recuperación se ha fortalecido, los países deben perseverar con esfuerzo de ajuste al mismo tiempo que alcanzan un acuerdo final sobre la gestión de crisis en la eurozona.

Sobre la situación de Estados Unidos, señala que la previsión para 2011 será inferior de lo estimado en abril y similar a la de 2010 (-9,9% frente al -10,8% de la anterior previsión), lo que permite que el ajuste fiscal en 2012 sea "menos abrupto". Pese a ello, incide en que es necesario "urgentemente" un consenso sobre un plan de ajuste creíble en el medio plazo.

En el caso de Japón, reconoce que su situación fiscal se ha visto afectada por el terremoto del mes de marzo y se enfrenta ahora a un incremento del gasto por los esfuerzos de reconstrucción, por lo que reclama un plan de ajuste más detallado en el medio plazo.

MENOR CONTAGIO EN LOS MERCADOS DE DEUDA.

Por otro lado, el FMI constata países como España e Italia han resistido en estos dos meses al contagio de la situación por la que atraviesan los países que han recurrido al fondo de rescate, y subraya, en concreto, que las preocupaciones de los mercados sobre la sostenibilidad de la deuda griega siguen siendo "agudas", ya que su diferencial ha subido alrededor de 600 puntos básicos desde finales de 2010.

En el caso de Irlanda y Portugal apunta que las preocupaciones sobre la dinámica de su deuda se han hecho más evidentes cuando el Banco Central Europeo (BCE) ha dejado de comprar deuda en el mercado secundario.

Asimismo, apunta que el contagio a otros países europeos ha sido "más limitado", con los diferenciales de Bélgica, Italia y España en general estables respecto a abril. Sin embargo, añade que, pese a la consolidación fiscal en marcha, sus primas de riesgo sigue en un rango de entre 140-260 puntos básicos en estos países.