Las buenas noticias en el sector turístico, principal sostén de la demanda exterior, son constantes en Canarias. Solo las emborrona el mercado nacional, que aporta menos visitantes al Archipiélago que hace un año. De todas formas, el tirón del turismo extranjero compensa este recorte: creció más del 20% en el primer semestre, hasta rozar los cinco millones de entradas, mientras que las de los residentes en España bajan un 2,6%, hasta 720.000. En otros términos, por cada cliente nacional que ha perdido Canarias hasta junio ha ganado 44 extranjeros. Para lo que resta de año, el lobby Exceltur pronostica que serán los establecimientos hoteleros de Canarias y Baleares los que más se beneficiarán del alza del mercado internacional. Y ello arrastrará, añade, a las empresas de alquiler de coches, por ejemplo. Esta tendencia también sube el ánimo de los empresarios: los hosteleros son los más optimistas en las Islas. De hecho, su confianza está en máximos desde que la crisis comenzó a notarse, según las Cámaras de Comercio. Hispalink advierte de que los fuertes crecimientos que está experimentando el turismo en cuanto a pernoctaciones -sobre todo en hoteles- se debe en parte a que esas tasas "tienen como referencia unas cifras muy bajas provenientes de la pérdida de demanda de los últimos años". Además, cree que esta puede ser la razón, junto con la incertidumbre que aún acecha a las economías europeas, de que el buen comportamiento del sector "no esté generando el volumen de empleo que en un principio se podría esperar". La patronal de la provincia tinerfeña Ashotel reitera que no es fácil ni inmediata la traslación de un aumento de demanda a las plantillas, pero ya ha anunciado que estas aumentarán en 20.000 trabajadores durante verano. Continuar esta senda es vital, por su repercusión sobre el consumo interno, según Hispalink, para acelerar el crecimiento de la economía isleña en 2012 y 2013.